Congreso de los centristas andaluces del 6 al 8 de junio
El primer congreso de la UCD de Andalucía, cuya celebración con carácter extraordinario fue acordada en la última reunión del comité ejecutivo regional, como respuesta a la crisis interna abierta por los resultados del referendo andaluz, será convocado para los días 6, 7 y 8 de junio, según han informado a este periódico fuentes centristas. La convocatoria del congreso saldrá de la reunión que tendrá en Málaga, el lunes próximo, la comisión delegada, creada recientemente para hacerse cargo de los asuntos más importantes del partido -relaciones con la Junta y los demás partidos, elaboración de un proyecto de estatuto, preparación del congreso-, en tanto no se produzca la renovación de los órganos directivos.Sevilla y Málaga son las ciudades en las que, en principio, se ha pensado como sede del congreso extraordinario, si bien no faltan quienes abogan por que se celebre en Almería, ya que para entonces se estará en plena campaña para la elección de dos sen adores en esta provincia.
Pese, a que es deseo general de los distintos sectores de la UCD andaluza celebrar cuanto antes este congreso extraordinario, el plan de trabajo elaborado por la subcomisión, que el lunes será sometido a la aprobación de la comisión delegada, va a exigir que se consuman en los debates previos los tres meses que, como plazo límite, marcó el comité ejecutivo regional para la celebración del congreso. La subcomisión encargada de la preparación del mismo, que componen Miguel Sánchez Montes de Oca (Sevilla), Francisco Soler (Almería) y Manuel Díaz (Huelva), pretende la elaboración de dos ponencias: una, sobre los rasgos de identidad de la UCD de Andalucía, a la que algunos pretenden que pase a llamarse Centristas de Andalucía, y otra, sobre la política autonómica.
En ambas ponencias se prevé una lucha política que puede ser un anticipo de la batalla que se librará en el congreso nacional de UCD, en octubre de este año. Los mismos sectores que empiezan a perfilarse en la UCD nacional -democristianos y martinvillistas, por un lado, y un conglomerado variopinto, por el otro- están librando ya una batalla abierta en Andalucía.
Por lo que respecta a la primera de las ponencias, los denominados progresistas y autonomistas, pretenden que se traduzca en una modificación de los estatutos de UCD.
En la reunión de Málaga del lunes se pretende designar a los redactores de las ponencias, quienes deben adquirir el compromiso de ultimarlas antes del día 1 de mayo, fecha en que han de ser remitidas a los comités ejecutivos provinciales, para que éstos, a su vez, le den curso a los comités locales y de distrito, donde se iniciará el debate de las ponencias y serán sometidas a un proceso de enmiendas. Una vez cubiertos estos trámites, se convocará una asamblea de un día de duración compuesta por los sesenta miembros del consejo político provincial más un representante de aquellos comités locales en los que haya prosperado alguna enmienda.
Todas las enmiendas que hayan pasado a la asamblea, incluso las minoritarias, entran en la mesa del congreso, y si obtuvieran el respaldo de un 30% de los comprornisarios, se someterán a debate y a votación en la asamblea.
Detrás de todo este procedimiento se encubre una batalla entre los dos sectores de la UCD andaluza. Este plan ha sido trazado por la comisión delegada, que no es vista de buen grado por la dirección de la UCD regional, ya que, en definitiva, la comisión delegada fue presentada, en su momento, como un plan para descabalgar a los budas del partido, término aplicable a los cargos directivos del comité regional y a los presidentes provinciales, en su mayor parte personalidades más comprometidas con la política de Madrid que con la de su provincia.
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