La CEOE, empeñada en lograr un convenio-marco interconfederal
La patronal está dispuesta a conseguir un acuerdo en la negociación del convenio-marco que hoy se inicia en la sede del Instituto de Estudios Sociales entre la CEOE, CCOO y UGT. Esta decisión de la patronal llevará a la CEOE a «ser la última representación que abandone la negociación y, si se producen abandonos, explicaremos exhaustivamente a la opinión pública a qué obedecen las posiciones que se den», aseguró el secretario general de la organización empresarial, José María Cuevas, en la rueda de prensa celebrada ayer para explicar la postura patronal ante la negociación.
José María Cuevas, al que acompaña el presidente de la comisión de relaciones laborales de la CEOE, insistió reiteradamente en que por parte de su organización no se ha tratado de imponer condición alguna para el inicio de las negociaciones. «Lo que sí pretendemos y, por supuesto, así lo plantearemos apenas nos hayamos sentado a negociar, es que desde el primer momento queden claras las posturas de las tres partes ante la negociación colectiva en puertas. Creemos que es absolutamente necesario que, sin llegar a una paralización de la negociación de convenios, éstos queden, en alguna medida, congelados en los aspectos concretos que sean objeto de negociación para el acuerdo-marco que perseguimos. No sería lógico que las partes se obligaran a determinados compromisos antes de saber cómo va a quedar la negociación que hoy iniciamos. »
No se ha pretendido un compromiso de "paz social"
No obstante, José María Cuevas hizo hincapié que en ningún momento se ha pretendido el compromiso sindical de mantener la paz social mientras dure la negociación, «aunque la actitud que al respecto adopten las centrales puede ser definitoria de la disposición negociadora con que acuden a la reunión ».En este sentido, Arturo Gil aclaró que la CEOE tampoco había impuesto como condición para ir a la negociación del convenio-marco el que estuviera previamente aprobado el Estatuto de los Trabajadores. José María Cuevas, no obstante, reconoció que en algún momento la CEOE se había mostrado escéptica sobre cualquier acuerdo interconfederal, sin que antes no estuviera definido el marco laboral a nivel jurídico. En aquella ocasión, la CEOE denunció lo que calificó de absentismo parlamentario, dada la lentitud con que se tramitaba en las Cortes el proyecto de Estatuto de los Trabajadores.
Estrategia negociadora
Por otra parte, la estrategia de la CEOE de cara a la negociación, que, por supuesto, no fue revelada a los periodistas, se centra -según dejaron ver- en ajustarse en lo sindical a lo que establezca el Estatuto de los Trabajadores, y en materia salarial, evitar la «consolidación de la inflación que supondría el aumentar los salarios de acuerdo con los incrementos registrados por el coste de la vida en el año anterior a la vigencia de los convenios objeto de negociación».En este último aspecto, José María Cuevas apuntó que no sólo se ha de tener en cuenta la inflación que genera el propio sistema interno de nuestra economía, sino que hay que atender las inflaciones añadidas que el mercado del petróleo está constantemente introduciendo en cualquier previsión económica a corto y medio plazo.
Lo que sí tiene claro la CEOE es que «pasó el tiempo de la linealidad en el reparto de los incrementos salariales, y, por supuesto, este aspecto no tiene ni que ser objeto de discusión».
Aunque los dos portavoces de la CEOE evitaron en sus intervenciones mencionar las siglas de CCOO, las reiteradas alusiones a determinada central, que «con su decisión de mantener un clima de conflicto y movilizaciones ajenas a la negociación harán sin duda difícil ésta», iban abiertamente dirigidas sobre la primera central del país, que, según anunció en días pasados, ha decidido abrir un frente paralelo de negociación bilateral con la CEPYME.
A este respecto, aunque a la CEOE le preocupa la postura de CCOO por lo que de distorsionante pueda suponer para la negociación entre las tres grandes, tanto Cuevas como Arturo Gil trataron de minimizar la negociación paralela, en especial por «la falta de sentido que supone de parte de la CEPYME, ya que, de hecho, se encuentra representada en la CEOE». En esta línea, Cuevas dejó bien claro sus dudas respecto a la capacidad negociadora de convenios a nivel estatal y sectorial por parte de la CEPYME.
Es posible un acuerdo bilateral con UGT
Ante la eventualidad de una posible retirada de la negociación de alguna de las dos centrales sindicales -las preguntas de los informadores se orientaron en este sentido hacia CCOO-, Cuevas señaló que no era desechable un acuerdo bilateral con UGT, «aunque está claro que ello comportaría serios problemas tanto para UGT como para la propia negociación colectiva. En cualquier caso, y ante nuestra decisión para obtener un acuerdo, no descartamos cualquier posibilidad y, de plantearse, será estudiada atentamente ».La representación de la CEOE que acude a las negociaciones está encabezada por su secretario general e integrada por Arturo Gil, José Antonio Segurado, presidente de la patronal madrileña CEIM; Víctor Pico, de la Confederación de Vizcaya; Julio San Miguel, de la organización catalana Fomento del Trabajo Nacional, y Javier Ferrer, de la Confederación de Zaragoza.
Al margen del tema de la negociación, José María Cuevas se refirió al conflicto surgido en la Comisión de Trabajo del Congreso que debate el proyecto de Estatuto de los Trabajadores en tomo a la postura del PNV, y afirmó que se ha politizado el tema. «CEOE no tiene intención de acabar con la negociación a nivel territorial, sino de establecer las reglas del juego y fijar que los convenios sectoriales deben establecer qué puntos pueden ser negociados y cuáles no, para evitar la dispersión de la negociación colectiva.»
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