_
_
_
_

Manuel Orantes, campeón de España por sexta vez

Manuel Orantes se proclamó campeón de España, al vencer en la final a Antonio Núñez, por un rotundo 6-2, 6-4 y 6-1. Desde 1975, el granadino no ganaba este título que ayer consiguió, por sexta vez, embolsándose medio millón de pesetas. En la final femenina, Mónica Alvarez Mon se impuso a Carmen Perea, que perdió el título tras tenerlo en su poder en los últimos seis años, por 1-6, 64 y 6-4. La nueva campeona se embolsó 150.000 pesetas. Antes de la final masculina se rindió un emotivo homenaje a todos los que fueron campeones de España a lo largo de la historia del tenis español.

Más información
Santana, récord de títulos

Pese a su cacareada irregularidad, pese a sus problemas con el brazo izquierdo, sus frecuentes lesiones, y todo un cúmulo de circunstancias que le llevaron a decir adiós a la Copa Davis, todavía hay mucha distancia entre Manuel Orantes y los demás, habida cuenta de que no participó en el campeonato José Higueras. Orantes jugó en el fin de semana tres partidos en los que nunca vio peligrar su triunfo. Su autoridad y superioridad en la pista fue inapelable, y ayer, en un final al mejor de cinco sets, no tuvo ni que emplearse más de un 60% en ningún momento. Antonio Muñoz tan sólo pudo hacerle cuatro juegos, y eso que el catalán nunca dio una bola por perdida. La diferencia era enorme, y de esto conviene tomar buena nota a la hora de echar la vista hacia la Copa Davis.Posiblemente, nunca Orantes en tan poco tiempo haya ganado tan fácilmente seiscientas mil pesetas con una raqueta en la mano al ganar el doble se embolsó cien mil-, pero la ausencia de Higueras y el que no hayan salido en los últimos años auténticas figuras así lo quisieron, y la verdad es que, desde antes de empezar el torneo, nadie dudaba de la victoria final de Orantes.En este aspecto hay que decir que el hecho de que Mari Carmen Hernández Coronado se adjudicase dos títulos -mixtos y dobles femeninos-, así como que Andrés Gimeno estuviese presente en dos finales -mixtos y dobles masculinos- es bastante elocuente.Más equilibrada y emocionante resultó la final que disputaron Carmen Perea y Mónica Alvarez Mon. La primera tenía monopolizado el título desde 1973. La segunda tiene -o tenía- cierto «complejo Perea», sin que ello signifique que su tenis es inferior. Todo quedaba reflejado en los comienzos del encuentro, y en el primer set Perea se impuso con un rotundo 6-1. Mónica está totalmente desdibujada en la pista y fallaba bolas incomprensibles, al mismo tiempo que estaba visiblemente desmoralizada. Así, Carmen se puso con un 3-0 en el segundo que hacía pensar en que todo estaba resuelto. No fue así, y por fin Mónica despertó, y lo que parecía increíble se produjo ante la sorpresa general. Su reacción la fue animando y ganó los dos sets restantes. Al final, con 5-4 y varias igualadas se alzó con la merecida victoria en el tercer match ball de que dispuso. Fue unjusto premio a la magnífica trayectoria y la buena temporada que ha hecho la pequena pero gran jugadora.

Muy emotivo -un bonito y oportuno detalle que, sin embargo, hace sentir cierta nostalgia de tiempos pasados tenísticos- resultó el homenaje que se tributó a todos los campeones de España, y así allí estaban des de Lilí Alvarez hasta Hernández Coronado, a la que casi cogen con la raqueta en la mano, y desde Manuel Alonso hasta ese otro Manuel que se llevó la más larga y cerrada ovación. Va a haber que empezar a pensar en la importancia que pueda tener el llamarse Manuel para ser alguien en el tenis español y mundial.

La anécdota de los campeonatos del presente año ha estado en la presencia de Juan Manuel Couder en individuales y Andrés Gimeno en los dobles.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_