Orantes no pasó de los cuartos de final en el Godó
El chileno Hans Gildemeister y el mexicano Raúl Ramírez, por un lado, y los norteamericanos Eddie Dibbs y Harold Solomons disputarán las semifinales del trofeo Godó. Ayer, en sus respectivos partidos, vencieron a Orantes, por 7-5 y 6-3; a Panatta, 5-7, 6-3 y 64; a Kirmayr, por 7-6 y 6-1, y a Smid, por 6-4 y 6- 1. De esta manera, ningún jugador español estará en las semifinales de este torneo. De ahí que la española Mónica Alvarez Mon, que perdió ayer con Budarova, por 6-2 y 6-2, haya sido la única raqueta española que alcanzó las semifinales. Las campeonas de dobles femeninos fueron las suizas Delhees-Sinimen, que vencieron a sus compatriotas Von Planta-Villiger, por 6-0 y 6-4.
Manolo Orantes no pudo, pese a que lo intentó por todos los medios y que siempre tuvo al público incondicionalmente a su favor, con el joven chileno Gildemeister, que siempre llegó a todas las bolas. Sorprendió en cierto modo este caluroso recibimiento y apoyo constante a Orantes, toda vez que recientemente dijo adiós a la Copa Davis. Habrá que empezar a pensar que no es el primer caso en que los directivos tengan su parte de culpa en que un jugador tome esta decisión, ya que no todos van a ser desganados o rebeldes a la hora de participar en la Copa Davis.Empezó bien Orantes, no solamente con el marcador a favor -llegó a tener 4-2-, sino dominando y mandando en la pista. Todo parecía indicar que el encuentro sólo tendría un color; sin embargo, la reacción del chileno llegó de forma rotunda y en dos juegos consecutivos dejó en blanco al español, poniendo el marcador en 4-5. Orantes, con su servicio, se puso en 15-40, y el chileno desperdició tres set-ball. Finalmente, y después de contar con otros dos set-ball, ya con 6-5, se impuso por 7-5. En el segundo set se repite la película, y después del 1-1, Orantes rompe el servicio de su rival y a partir de aquí uno y otro perdieron sucesivamente sus servicios, pero de nuevo ese brazo de Orantes, que nunca llegó a estirar bien, proporcionó el triunfo a Gildemeister. Al final de una jornada interminable, que tuvo que interrumpirse por la intensa lluvia que cayó.
El encuentro más emocionante y más bonito y que ofreció, sin duda alguna, mayor calidad fue el que disputaron el italiano Adriano Panatta y el mexicano Raúl Ramírez, que terminó incluso con bronca final para el italiano, ya que la gente no olvida su famoso altercado de hace unos años. Fue un encuentro precioso, ya que ambos jugadores arriesgan mucho en su tenis, con subidas constantes a la red y preciosas voleas que causaron las delicias del público, que les brindó fuertes y prolongadas ovaciones.
El partido había sido suspendido a causa de la lluvia durante algo más de una hora, cuando el marcador se encontraba con empate a un set (5-7, 6-3), y empate a un juego en el tercer set. El primer set, que se adjudicaría el italiano, resultó tremendamente competido. Ramírez llegó a tener una ventaja de cinco a tres, y el servicio a su favor, coyuntura que desaprovechó. Panatta recuperó la desventaja y se apuntó la primera manga. Luego, el italiano se vería sorprendido en los dos siguientes sets por el preciso juego sobre la red de Ramírez.
Solomons sólo encontró resistencia en el brasileño Kirmayr en el primer set, imponiéndose con facilidad y autoridad en el segundo, y lo mismo se puede decir de su compatriota Dibbs frente al checo Smid,
Hoy, a partir de las doce menos cuarto de la mañana, se disputará la semifinal Gildemeister-Ramírez y a continuación se enfrentarán Dibbs y Solomons. Por último, hay que decir que a última hora ya se conocen los nombres de las finalistas femeninas. Se trata de la sueca Lena Sandin, triunfadora en el Grand Prix de Madrid, y Budarova.
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