Trampa saducea

Pablo Porta fue abucheado en Vigo por no haber concedido a aquella población gallega un encuentro internacional de competición. La concesión a Valencia del España-Yugoslavia, que entraba dentro de la lógica meteorológica, fue ocultada en una conferencia de prensa que dio el presidente federativo. El miércoles, en Valencia, los pitos se tornaron en aplausos en favor de Porta por repetir el anuncio hecho el 17 de julio de que Mestalla será escenario de los tres partidos de la selección hispana en la fase preliminar del Mundial.El público de Mestalla, crispado por acontecimientos extradeportivos, fue manipulado a través de los altavoces con la trampa saducea de querer dar versión oficial a lo que ya lo era desde julio.

Cuando Saporta, en conferencia de prensa, anunció las sedes definitivas del Mundial -insisto, el 17 de julio-, explicó todos los pormenores de la competición. Entre otros, el porqué se concedía a Sevilla una semifinal y a Barcelona el partido inaugural. Saporta dejó bien claro que Valencia sólo tendrá tres partidos, pero justamente los que disputará la selección española. No ha habido ratificación oficial por parte de Porta, puesto que el máximo mandatario del tema es Saporta.

Lo que hizo Porta es como si, tras la publicación en el BOE de un decreto, un director general quisiera concederle oficialidad meses después. El personal cayó en la trampa. Porta se apuntó un buen tanto a costa de la flaca memoria del personal.