La liga de baloncesto, con más interés que en los últimos años
A partir de mañana, doce equipos, Areslux, Barcelona, Basconia, Cotonificio, Estudiantes, Helios, Joventut, Manresa, Mollet, Real Madrid, Tempus y Valladolid, disputarán la 24.ª edición de la Liga de Primera División. En las veintitrés ediciones anteriores, sólo tres equipos se adjudicaron el titulo: Real Madrid (20), Barcelona (1), en la temporada 1958-1959, y Joventut (2), en la 1966-1967 y 1977-1978. De nuevo serán estos tres equipos los que en la temporada 1979-1980 tendrán opción al título, si bien parece que serán blancos y azulgranas los que luchen con fuerza e igualdad para alzarse con el triunfo final, quedando el Joventut como juez que puede decidir muchas cosas en su cancha de Badalona.
ANGEL CALLEJAEn la totalidad de los equipos ha habido altas y bajas, así como se han registrado bastantes cambios de entrenadores y en los extranjeros, que en esta ocasión son todos norteamericanos. Este movimiento, poco habitual en anteriores temporadas, propicia, sin duda alguna, un mayor interés a la competición, que se ve aderezada de muchos más alicientes que en otras ocasiones. Dentro de todo ello, quizá destaquen las bajas de Carmelo Cabrera y Cristóbal en el Real Madrid, la de Gonzalo Sagi-Vela, en el Estudiantes, y las de Juan Ramón Fernández y Juan Fiblá, en el Joventut.El cambio más importante que ha experimentado el Areslux ha sido el de su americano Charles Simon, con el que terminó tirándose los trastos a la cabeza. Simon se ha incorporado al Tempus, y un mozalbete de 2,07, que responde al nombre de Mark Young, será el que juegue esta temporada en Granollers.
Giro de 180 grados en la sección de baloncesto del Barcelona, que el presidente Núñez se ha empeñado en potenciar, lo que traducido quiere decir que hay que ganar el título. Parece que por fin va a haber una disciplina férrea en el club azulgrana, que fichó como responsable de la sección a Jorge Bonareu, hombre de medidas enérgicas que cabe esperar no haya perdido el tren, ya que hace varios años que estaba apartado del mundo del baloncesto a estos niveles. El Barcelona, al mismo tiempo que se ha reforzado, ha debilitado a su gran rival catalán, el Joventut. Antonio Serra y Juan Ramón Fernández pasaron de la Penya al Palau Blau Grana.
Sin duda alguna, el Barcelona es el más directo rival del eterno campeón, Real Madrid, al que ya se da siempre como favorito por inercia. En esta ocasión, el «cinco» que puede presentar Serra, con Ansa, Epi, Fernández, Sibilio y Guyette, puede causar verdaderos estragos, y más aún si Solozábal coge fuerza, pues no hay que olvidar que se trata de uno de los bases -si no el que más- más inteligentes del baloncesto español.
También el Basconia ofrece cambios. Se quedó sin Williams, que volvió al Helios, y lo sustituyó por Malcom Cesare- veintitrés años y 2,04-, al mismo tiempo que incorporó a Pello Cambronero, procedente del Estudiantes.
Aito García Reneses sigue al frente del Cotonificio, en el que, por fin, parece se queda Jack Schraeder, que tuvo problemas con una inesperada lesión. Lo más destacado en cuanto a fichajes es la incorporación de Filbá. El Cotonificio ya se sabe que es capaz de todo, incluso de ganar a los grandes, y esta temporada su incansable ambición le llevará de nuevo a luchar para alzarse con el cuarto puesto, que significa ser el primero de esa «otra Liga» de la que tanto se ha hablado.
Es evidente que el equipo que más se ha debilitado ha sido el Estudiantes. Cinco hombres que ' jugaron la pasada temporada no lo harán ésta: Gonzalo Sagi-Vela, Chris Potter, Andrés Soriano, Angel Fuertes y Pello Cambronero. Tan solo Potter ha sido sustituido con garantías. No hay quien ocupe el puesto de Sagi-Vela, y Jesús Codina tiene que confiar en los juniors, ya que sólo había dinero para Larry Gibson, que así se llama el Divot de color que cubrirá la plaza de extranjero en los del Ramiro.
El entusiasta Helios, de la mano del no menos entusiasta José Luis Rubio, parece dispuesto a ser, junto con el Valladolid, el animador de la «fiesta». Los maños se han movido en todas las direcciones y han intentado todo tipo de fichajes. Consiguieron que volviera Williams a sus filas y han incorporado a Juan Mari Pérez, procedente del Askatuak, que es un refuerzo importante.
La baja de Slavnic
Los cambios que ha experimentado el Joventut le van a llevar, sin duda, a modificar casi por completo la fisonomía de su juego. Sin ir más lejos, ésta se la daba últimamente ese fuera de serie del baloncesto que es Zoran Slavnic, que ya no se vestirá de verdinegro. Importantísima es la baja de Juan Ramón Fernández, e igualmente notará la ausencia de Juan Filbá. Lluis sucederá a Serra en el banquillo y se ha decidido por fichar un pivot que ayude a Luis Miguel Santillana. Es norteamericano y se llama Al Carlson (veintiocho años y 2, 10) Fichaje muy importante es el de Gonzalo Sagi-Vela, y una buena adquisición, la de Germán. Los Bosch, Sagi-Vela, Germán, Margall, Carlson y Santillana pueden optar a casi todo, pese a que parece un equipo algo inferior a Barcelona y Madrid.Surge la lógica duda de si el Manresa se apañará a jugar sin Juan Martínez después de tantos años de mandar en la cancha. Martínez fue una institución, primero, en Mataró, donde ahora vuelve, y después, en Manresa. Es de los equipos que menos cambios ha hecho. Sigue con Bob Fullarton como extranjero y siguen Víctor Manuel Escorial y Miguel Angel Estrada.
Aunque oficialmente no figure así, todo indica que ha sido el Barcelona el protector del Mollet y el que ha evitado que el equipo se quedara sin «salir» en la máxima categoría. Se lo juega casi todo a la baza de Mike Philips, que próximamente pasará al Barcelona, el americano que quería el Joventut y que, según parece, terminó en el Mollet, gracias a una gestión de Moncho Monsalve, ayudante de Serra en el cuadro azulgrana. Un ayudante de lujo que no quita la vista del Mollet, donde, curiosamente, ha ido a parar otro jugador del Barcelona: Práxedes. Por contra, se quedaron sin el concurso de Germán, ahora en el Joventut.
Renovación en el Madrid
El Real Madrid fue el primero en dar la campanada poco después de finalizada la temporada anterior. Dio la baja a dos jugadores de la talla de Carmelo Cabrera y Cristóbal, para sustituirlos por José Luis Llorente y Fernando Romay, ambos del Tempus. Especialmente, la baja de Cabrera causó asombro en el hombre de la calle, aunque no en el del mundillo del baloncesto, pues la cosa se empezó a sospechar a raíz de que Díaz-Miguel no lo incluyera en la lista de los seleccionados. Evidentemente, Lolo Sainz sigue arriesgando en esa difícil papeleta que supone renovar un equipo que no puede dejar de ser el primero. En la anterior temporada se jugó la baza de prescindir de Coughran y ahora se decidió por la juventud y los centímetros (Romay mide 2,11), y en lo que no cambia es en mantener a Walter sin jugar la Liga. Lo hará de nuevo Randy Meister.Entre los muchos cambios que hay en el comienzo de esta Liga figura también el de una cancha. El Tempus ya no jugará en Vallehermoso. Lo hará en Pozuelo, hecho que fue desmentido después de que EL PAIS lo publicara en su número del 24 de mayo, en el que se decía que llegaría a los escolapios de Pozuelo de la mano de UCD, como así es. El intermediario de la gestión ha sido Emiliano, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de la localidad madrileña, donde ganó el partido del centro. Raimundo Saporta, máximo rector del Tempus, se resistió un poco, pero al final accedió, ya que este traslado era importante para cambiar la imagen del equipo, máxima preocupación de Saporta. De ahí que empezara por cesar al cuadro técnico anterior, en contra casi de la opinión pública, para dar entrada a su amigo de siempre, Ignacio Pinedo, también seleccionador junior. (Saporta es el responsable de todas las selecciones de baloncesto.) Con Ignacio Pinedo se incorpora Pardo como segundo entrenador, y Nardo Lombao, como preparador físico y cuñado de Pardo.
Saporta es hombre que cuida mucho las formas y esto le costó el puesto al anterior técnico, Rafael Peiró, que, efectivamente, perdía a veces los nervios en el banquillo. Saporta es también hombre que no olvida, y sabe que Pinedo es todo lo contrario. No hace mucho, y con motivo de este cambio de técnico, recordaba cómo se «tragó» estoicamente la derrota frente a Yugoslavia en la final del europeo junior de Orleans, que se produjo en el último segundo y por una desobediencia de Manuel Bosch, que, como los demás, tenía orden de no lanzar a canasta, ya que faltaban ocho segundos y España ganaba por un punto.
El Tempus es un equipo joven, ya que los mayores son Prado y el americano Simon, procedente del Areslux, que tienen veinticuatro años. Hay otros dos jugadores con veintitrés; uno, con veinte, y cinco, con diecinueve años. En el conjunto se dan cita potencia y fuerza, sin olvidar los centímetros, ya que el más bajito mide 1,83 (Mardones), y salvo De la Nuez, que mide 1,86, el resto pasa del 1,90, con Simony Fermosel que están por encima de los dos metros.
Cabrera, en el Valladolid
Indudablemente, las incorporaciones de Carmelo Cabrera y Nate Davis, procedente del Askatuak, son las notas más destacadas de ese Valladolid, que parece dispuesto a todo en todos los terrenos. También hay que señalar el fichaje como técnico de Vicente Sanjuán, que, tras su paso por el Barcelona y el Areslux, pasa ahora a un conjunto castellano.Mañana, pues, se alza el telón con cinco de los seis partidos que componen la jornada. Estos son sus horarios: Tempus-Estudiantes (18,00 horas), en los escolapios dé Pozuelo, con Pardo y R. Blandon; Joventut-Helios (20,45), con Bagué y R. Godoy; Mollet-Areslux (20,45), con H. Cabrera y Recuenco; Valladolid-Cotonificio (20,15), con Mariné y Abellán; Real Madrid-Basconia (19,00), con Vilagrasa y Puebla. El domingo se jugará el Manresa-Barcelona, a las doce y media, en El Congost, con arbitraje de Marce y Urreizti.
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