Cambios en la dirección de Astilleros del Atlántico y Ascon
Robert J. Slinin, figura pública de la sociedad naviera Euroflot, ha asumido la presidencia de Astilleros del Atlántico, SA, de Santander, sociedad hasta ahora propietaria de la mayoría del capital de Astilleros Construcciones, SA, de Vigo. Al mismo tiempo, el director de los astilleros santanderinos, De Benito, ha pasado a dirigir la naviera.
Esta operación de reajuste de cargos parece estar relacionada con una serie de negociaciones llevadas a cabo hace algunos días entre un grupo supuestamente interesado en la compra de los astilleros de Ascon. Según medios próximos a la industria de construcción naval, la operación ha culminado con la adquisición por Euroflot del 70% de las acciones de Astilleros del Atlántico y el mismo procentaje de las de Ascon. En el cambio de puestos directivos de las citadas sociedades se incluye la asunción por Felipe Font de Querol de la dirección general de Astilleros del Atlántico, abandonando la de Ascon, que ostentaba y que ha sido asumida por el hasta ahora director de la factoría de Ascon en Ríos, Carlos Gómez Coé. Felipe Font continúa con el cargo de administrador único de Ascon.Aunque en fuentes de las empresas citadas se niega que haya habido venta de los astilleros de Ascon en Meira y Ríos (en la ría de Vigo), en los medios industriales y mercantiles de Santander se da como segura la adquisición del paquete de acciones de las empresas de Santander y Vigo citadas por la naviera Euroflot.
Una larga huelga
Robert J. Slinin había sido administrador único de Ascon en el momento en que Astilleros del Atlántico decidió suprimir el consejo de administración de aquella empresa, recurriendo a la fórmula de administrador único, y coincidiendo con los momentos de mayor tensión del largo conflicto desarrollado en los astillero-Seritre febrero y octubre de 1978. Durante ocho meses, los 1.800 trabajadores de Ascon mantuvieron una huelga en respuesta al cierre patronal de la empresa, llegando a alterarse seriamente la vida de Vigo. La chispa que hizo saltar e¡ conflicto fue el despido de un trabajador por una falta contra un encargado. El propio ministro de Trabajo fue aceptado, finalmente, como árbitro para dar una salida al estancamiento al que se había llegado. El laudo del ministro supuso el despido con indemnización para cinco líderes sindicales, la resolución del contrato para más de cuatrocientos trabajadores de empresas de contratas y la reincorporación al trabajo del resto de la plantilla.Posteriormente, la empresa insistió en llevar adelante un expediente de regulación de empleo para 370 trabajadores de las dos factorías de Vigo, que Finalmente fue desestimado por la Delegación Provincial de Trabajo. Hace un mes, la dirección de la empresa consiguió establecer un acuerdo con el comité de empresa, refrendado por la asamblea de trabajadores, por el que se pactó una rescisión temporal de contratos para 190 trabajadores, que se turnarían cada tres meses en la percepción del seguro de desempleo.
Esta medida de Ascon ha puesto últimamente en difícil situación a los demás astilleros de la ría de Vigo, y cuatro de ellos comunicaron a sus respectivos comités de empresa, en diferente grado de concreción, la posibilidad de conseguir una fórmula parecida. Uno de ellos, Santodomingo, tiene ya previsto presentar un expediente de regulación para trescientos de sus 450 trabajadores, además de otros pertenecientes a empresas auxiliares y asociadas.
Ascon se encuentra actualmente pendiente de presentar las adhesiones suficientes al convenio propuesto a sus acreedores en el expediente de suspensión de pagos que inició a partir del conflicto del año pasado. La masa acreedora de Ascon asciende a cerca de 4.000 millones de pesetas, de los que unos 2.400 son el pasivo exigible.
