Próxima aprobación de la financiación de los "stocks" de carbón de ENDESA

El Consejo de Ministros podría decidir en próxima reunión la financiación de los stocks de carbón acumulados por ENDESA en la central térmica de Compostilla (Ponferrada), según han confirmado a EL PAIS fuentes de esta empresa. Hasta el momento se desconoce el alcance y criterios de la futura «norma reguladora de financiación de stocks coyunturales de carbón» -tal como figura oficialmente-, así como su posible incidencia en el proceso de privatización de la central térmica a favor de FENOSA.

Los stocks de hulla y antracita almacenados en Compostilla ascienden a tres millones de toneladas, valoradas en unos 10.000 millones de pesetas. Estas cifras deberán, al menos, duplicarse antes de 1983 para atender al abastecimiento de dos nuevos grupos térmicos que serán construidos en la misma zona, cada uno de ellos con 350 megavatios de potencia, de acuerdo con los proyectos de ampliación de la central. El elevado coste de tales stocks había provocado serias dificultades de tesorería a ENDESA y, paralelamente, a las minas de El Bierzo, que desde hace casi un año han venido cobrando los suministros de carbón con varios meses de retraso. Del mismo modo, los problemas financieros de ENDESA fueron utilizados como argumento para iniciar negociaciones con FENOSA en orden a la privatización de Compostilla, cediendo a esta última empresa el 49 % de la inversión en los dos grupos térmicos antes citados, más el tercero proyectado, adjudicado, en principio, a FENOSA.En este sentido, la «norma reguladora» a debatir en el Consejo de Ministros tendrá una importancia clave para el futuro de Compostilla. Se desconoce si la financiación de los actuales stocks de carbón se hará con dinero público y en cuantía suficiente como para solucionar el problema de forma total o si, por el contrario, se pedirá ayuda al sector privado. En el caso de que a ENDESA se le facilitaran recursos financieros suficientes para hacer frente a dichos stocks, la negociación con FENOSA -sobre la que se ha prometido un comunicado oficial para esta semana- carecería de buena parte de su sentido. Hay que recordar, sin embargo, que la privatización de Compostilla obedecería a motivaciones políticas y no a criterios de carácter económico, a juicio de los propios trabajadores y de algunos altos cargos de la Administración.

Hace dos días tuvo lugar en León una nueva reunión de las empresas mineras con representantes de CCOO en la que las primeras advirtieron sobre la posibilidad de presentar numerosos expedientes de crisis -hasta un total de diecinueve que afectarían a unos 1.500 trabajadores del sector si ENDESA no levantaba las restricciones en los suministros de carbón a Compostilla, puestas en vigor hace dos meses ante la imposibilidad de financiar los actuales stocks. La patronal minera y CCOO han enviado conjuntamente un telegrama al comisario general de la Energía, Luis Magaña, pidiendo la supresión de tales restricciones y la compra adicional de otras 75.000 toneladas de carbón antes de fin de año para salvar la «crisis de pedidos» que padecen las empresas.