El Barcelona alinea reservas en Islandia

Los jugadores del Barcelona, si son convocados por Kubala para el partido internacional amistoso España-Portugal, el día 26, en Vigo, según los estatutos de la Federación Española, no podrán actuar con su equipo en el partido de ida de la primera eliminatoria de la Recopa, que se celebrará ese mismo día en la ciudad islandesa de Akranes, frente al equipo que lleva el mismo nombre. El artículo 365 de los estatutos de la Federación Española establece que «los clubs federados están obligados a prestar su colaboración y los jugadores de sus equipos que a tal efecto fuesen convocados, y éstos, a cumplir sus deberes de internacionales».El Barcelona, a pesar de tener conocimiento de tales normas y de que el 26 se disputaría el partido internacional amistoso España-Portugal, accedió a la petición del Akranes de variar el orden de los partidos de la eliminatoria y a que el encuentro de ida se disputase en esa misma fecha. La UEFA, antes de conceder autorización para tales modificaciones, solicitó el consentimiento de la Federación Española. El organismo federativo español contestó afirmativamente, después de que obtuviera del Barcelona la promesa de que los jugadores con los que deseara contar Kubala para el partido frente a Portugal estarían en Vigo, y no en Akranes, con el conjunto azulgrana.

El club azulgrana accedió a cumplir tales condicionamientos en previsión de que su eliminatoria frente al campeón de la Copa islandesa no será un obstáculo demasiado difícil. El Barcelona considera que la ausencia de los posibles jugadores internacionales que seleccione Kubala para el partido frente a Portugal no será impedimento para pasar a la siguiente eliminatoria.

Si el Barcelona o alguno de sus jugadores seleccionados por Kubala se negase a jugar en el equipo nacional español, según el reglamento de la Federación Española, podrían ser castigados con las sanciones que establece el artículo 396 del mismo y que se concretan en multa, amonestación, separación de la organización federativa y suspensión por un determinado número de partidos, que podría oscilar entre un mínimo de uno y un máximo de veinticinco, o por un período de tiempo concreto, que iría desde un mes a cuatro años, según la escala gradual de la infracción cometida.