Continúa paralizada la cuenca del Bierzo

Alrededor de 3.000 trabajadores de las minas de antracita del Bierzo y Laciana no se incorporaron ayer al trabajo tras la huelga general registrada en la zona el pasado jueves. El paro de ayer afectó sobre todo a grupos de la empresa Minero Siderúrgica de Ponferrada (MSP), la mayor empresa minera de la cuenca, con unos 4.000 trabajadores. También durante el día de ayer prosiguieron su encierro cien trabajadores de la misma empresa en los pozos Calderón, Orayo Bolsada y Lumajo.

Entre tanto, en Madrid se entrevistaron cuatro representantes de los trabajadores, pertenecientes a las centrales sindicales Comisiones Obreras y UGT, con la dirección de la MSP.En la entrevista se trató la posibilidad de hacer efectivo el pago de los salarios correspondientes al mes de junio y la paga extraordinaria de julio. La empresa ofreció pagar el próximo lunes el 50% de la nómina de junio y el 50% de la paga extraordinaria, y el próximo día 27 -tras el pago de Endesa a las empresas mineras de quinientos millones, el día 25-, el resto. La otra posibilidad ofrecida consiste en pagar el total de lo adeudado a los trabajadores el día 27. A última hora de la tarde de ayer los trabajadores todavía no habían dado respuesta a la proposición.

Por otra parte, las conversaciones mantenidas el pasado jueves entre representantes de los trabajadores, empresarios mineros, Endesa y los parlamentario de UCD por la provincia, Rodolfo Martín Villa y Ubaldo Nieto, han sido calificadas por las centrales sindicales de «rotundo fracaso».

La única solución ofrecida por Endesa consiste en que los bancos sustituyan las letras vencidas y en circulación, correspondientes a los suministros de marzo a junio, por nuevas letras que aceptaría la Empresa Nacional a un plazo de 180 días, con un interés anual del 12%.

La respuesta negativa de los bancos no se hizo esperar e inclusive el Banco de Santander, con el mayor volumen de negocio en el sector -según manifestaron fuentes empresariales a EL PAIS-, ya había comunicado horas antes de iniciarse la reunión que no aceptaba el riesgo. El Banco Central, según las mismas fuentes, consideró que el 12% era un interés excesivamente bajo, y de igual forma se pronunciaron otras entidades bancarias.

«Si el crédito de la banca privada llega a la cuenca berciana», se nos decía, «será por el aval personal de los empresarios, en su mayoría pequeños y medianos. Endesa no parece ofrecer actualmente excesivas garantías al dinero»

En la misma reunión, el presidente de Endesa, señor López Jiménez, presentó un informe de la empresa y de sus avatares durante los últimos meses, señalando que los problemas de Endesa tenían tres raíces: dificultades en el mercado bancario, fuerte inversión en la expansión y falta de financiación de los stocks.

Como consecuencia de lo anterior, Endesa decidió adoptar tres medidas: reducirlas inversiones de expansión en 3.000 millones de pesetas durante el presente año, anular las compras de carbón de las explotaciones a cielo abierto y restringir las del subsuelo.

A continuación, el presidente expuso la situación actual señalando que en estos momentos se negocia un crédito con el Banco de Crédito Industrial para la acción concertada de las nuevas unidades de Compostilla, al mismo tiempo que se negocian otro tipo de créditos bancarios. También se está tratando de colocar obligaciones en el mercado.

El señor López Jiménez se refirió a continuación a la reciente subida de las tarifas eléctricas, señalando que este incremento se hará notar y repercutirá en una mayor liquidez de la empresa en el segundo semestre del presente año.

Por último, señaló que en mayo la situación era grave, estando previsto entonces un déficit, al 31 de diciembre del presente año, de 10.000 millones de pesetas, pero que por las acciones tomadas por la empresa, descritas anteriormente, se piensa que la empresa cerrará el ejercicio económico de 1979 con un déficit de 2.000 a 4.000 millones de pesetas.

Como medidas de contención, aunque insuficientes, el día 25 Endesa pagará quinientos millones de pesetas y el próximo mes de agosto novecientos millones más.