Varias agrupaciones madrileñas aprueban la gestión de sus delegados

Una parte sustancial de las agrupaciones socialistas madrileñas han aprobado la gestión desarrollada por sus delegados en el XXVIII Congreso del PSOE, con pronunciamientos que, en general, reflejan un cierto reforzamiento de la línea moderada en Madrid.La agrupación de Alcorcón aprobó, casi por unanimidad, la gestión de su delegación, encabezada por Juan Barranco; lo propio ha hechó la de San Blas, encabezada por Eugenio Morales, agrupación esta última que votó en el congreso tanto la gestión de la ejecutiva federal como la enmienda que trataba de suavizar la definición marxista del partido. Igualmente ha sido aprobada la gestión de los delegados de la agrupación de Chamartín, en este caso con un cierto número de abstenciones.

La asamblea de esta última agrupación escuchó también las explicaciones de Enrique Barón -delegado electo, que dimitió en vísperas del congreso- sobre las razones de su actitud, en el sentido de que no podía admitir mandatos imperativos (votar en contra de la gestión de la ejecutiva) que van contra su forma de pensar.