Posible comunicación del Gobierno al Parlamento sobre la situación del orden público

Tras el intenso fin de semana en la Moncloa, la declaración oficial del Gobierno, que se esperó durante toda la jornada de ayer, en los medios políticos -no se descartaba la comparecencia de Adolfo Suárez a través de la pequeña pantalla-, no se había producido anoche. En fuentes próximas a la Presidencia del Gobierno ganaba puntos la idea de encatizar a través del Parlamento la comunicación gubernamental al país. Al parecer, Unión de Centro Democrático (UCD) aprovecharía la oportunidad del ambiente de tensión producido para solicitar del Pleno del Congreso de los Diputados que se celebra mañana la autorización al Gobierno de medidas adicionales para la lucha contra el terrorismo.

El portavoz del grupo centrista, Antonio Jiménez Blanco, que ayer consultó esta posibilidad con numerosos diputados y representantes de otros grupos, podría plantear hoy, en la reunión de la Mesa con los portavoces, la inclusión de un nuevo punto en el orden del día de la sesión de mañana, relativo a la situación planteada por la escalada terrorista.El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, permaneció reunido el domingo durante gran parte de la jornada con varios miembros de su Gabinete, entre ellos el vicepresidente primero para Asuntos de la Defensa y Seguridad, teniente general Manuel Gutiérrez Mellado; ministro de Defensa, Agustín Rodríguez Sahagún, e Interior, teniente general Antonio Ibáñez Freire.

Al margen de las diversas reuniones celebradas en el Ministerio del Interior, a distintos niveles, para analizar los últimos hechos terroristas, a las que se celebraron en la Moncloa asistieron también los ministros de Transportes y Comunicaciones, Salvador Sánchez Terán; Relaciones con las Cortes, Rafael Arias-Salgado, y adjunto a la Presidencia, Joaquín Garrigues Walker.

El señor Suárez, que recibió al presidente del Congreso, Landelino Lavilla, se reunió también con el presidente de la Junta de Jefes de Estado Mayor, teniente general Ighacio Alfaro, y con los jefes de Estado Mayor de los Ejércitos de Tierra, teniente general José Gabeiras; Aire, teniente general Emiliano Alfaro, y de la Armada, almirante Arévalo. A esta reunión asistieron también los tenientes generales Gutiérrez Mellado e Ibáñez Freire.

Esta última reunión, que se prolongó hasta después de medianoche, además de su carácter informativo sobre las medidas tomadas, sirvió para que los responsables máximos de la cadena de mando militar de los tres Ejércitos coincidieran -según la información oficial facilitada- «en el apoyo y confirmación del conjunto de medidas que se están desarrollando». En fuentes próximas a la presidencia del Gobierno se destacó a EL PAÍS el éxito político que significaba este resultado de las conversaciones citadas, cuya redacción, de origen castrense, revela la inexistencia de fricciones entre las instituciones civiles y militares.

Algunos testigos presenciales de la salida de los participantes en la mencionada reunión manifestaron el ambiente de gran distensión que se observaba.