Zoetemelk ganó la Vuelta-79, su primera prueba por etapas

El holandés Zoetemelk se proclamó el domingo vencedor absoluto de la Vuelta a España de este año. El belga De Wolf ganó la última etapa, disputada en un circuito urbano de Madrid. Alrededor de 150.000 personas presenciaron, en directo, la etapa, en la que no faltó colorido y espectacularidad, y también interés. El alcalde de Madrid y altos cargos del Consejo Superior de Deportes, después de presidir la salida, hicieron entrega a los triunfadores de los trofeos conquistados. Zoetemelk, con esta victoria, obtiene su primer triunfo en una de las tres carreras importantes por etapas. En el Tour sólo ha podido ser segundo

La última etapa de la Vuelta a España, disputada en Madrid, en el circuito de la avenida del Generalísimo, que va desde las plazas de San Juan de la Cruz a la de Castilla, contó con colorido, espectacularidad y animación. Los 5.600 metros del recorrido, al que hubo que dar quince vueltas, en un estado de inmejorables condiciones, fue propicio para los tirones, la lucha y el interés. Acciones aisladas de hombres que buscaron, por algunos momentos, que se hablara de ellos, caben destacar como alicientes más importantes. Entre estos héroes por minutos figuraron Juárez y Belda.El alcalde de Madrid, el profesor Tierno, cortó la cinta azul de la salida frente al estadio Bernabéu Los corredores enfilaron hacia abajo, camino de la plaza de San Juan de la Cruz, en plan de fiesta, como los numerosos espectadores que presenciaron su paso. La Vuelta estaba decidida. El jersey amarillo de Zoetemelk destacó sobre los demás. Todos los corredores que tomaron la salida fueron conscientes de que la última etapa sólo podía servir como aliciente de una fiesta deportiva, y así fue.

El recorrido contó con dos datos importantes: una parte de pequeño descenso, desde la plaza de Castilla a la de San Juan de la Cruz, y otra de ascenso, en sentido inverso. El descenso sirvió para que algunos corredores intentasen la escapada, como así fue. Pero los intentos eran tan fugaces como corto el recorrido. En la parte del ascenso, con el suficiente, pero mínimo, esfuerzo el pelotón apenas tuvo que hacer algo para anular cualquier escapada, por seria que fuese. La historia se repitió en una vuelta, y en la otra, también. No hubo escapadas consumadas, ni hombres que se retrasaran. Zoetemelk se limitó a figurar en los primeros lugares del pelotón, sin intentar el más mínimo esfuerzo. De Wolf, por su parte, corno siempre en los últimos lugares, acumulando fuerzas para obtener su quinta victoria y la novena de su equipo en la Vuelta, que inició en Jerez, prácticamente como experiencia.

La primera vuelta al circuito fue la más rápida: cuatro minutos y veinte segundos. Los corredores iniciaron la última etapa con fuerza. Después, el fuerte calor se dejó notar y aumentaron el tiempo en recorrer cada vuelta. Juárez propicio la escapada más duradera -apenas cuatro vueltas- Primero escapó en solitario y después se le unieron ocho hombres más. Todos los equipos estuvieron representados en esta ligera escapada. Nunca llegaron a conseguir una diferencia superior al minuto, ni siquiera una distancia igual a la mitad del recorrido del circuito. Belda también llegó a correr en solitario, pero brevemente.

Cuando quedaban dos vueltas, todos los hombres se reagruparon en el pelotón en busca de la táctica conveniente que les proporcionase el triunfo. Se trató de una victoria apetecible: ganar en la última etapa y en Madrid. Adri van Houweligen preparó maravillosamente el sprint del jefe de fila de su equipo. Se trató de De Wolf, el maillot azul. Van Houweligen, prácticamente, tuvo que frenar para que su compañero obtuviese el triunfo.

El final de la Vuelta a España de este año ha sido brillante. La idea fue sugerida, precisamente, por los organizadores que desistieron de llevar a cabo la ronda española el pasado mes de febrero. Entonces se pensó que el rey Juan Carlos presidiera la etapa final, lo que realmente hubiera hecho, de no encontrarse en visita oficial por diferentes países africanos.