Equilibrio entre Ferrari y Ligier, previo al Jarama

La primera mitad de la parte inicial del Campeonato del Mundo de fórmula 1 se ha cubierto. Las cuatro lejanas pruebas que preceden al Gran Premio de España, que abre la temporada europea, se han cerrado con un saldo parejo entre dos grandes fuerzas, Ligier y Ferrari. El primero de ellos, poco acostumbrado a figurar en los puestos de honor, mientras que el segundo, que ha quebrado brusca y radicalmente la fulgurante marcha del otro, figura desde siempre entre los máximos favoritos.

El arrollador debut de los Ligier en las dos pruebas suramericanas que abrían la temporada constituyó la gran sorpresa de este año. Pocos esperaban un comienzo tan fulgurante de los coches franceses, cuando los Lotus, eran los inicialmente destinados a la obtención de esos éxitos. Pero la puesta a punto de los Ligier en los primeros compases de la temporada, cuando los demás están aún faltos del ritmo adecuado, dio los frutos apetecidos por el joven equipo galo.El Ligier es un coche estudiadísimo en el campo aerodinámico. Sus soluciones van más allá de las que podrían denominarse ya como clásicas de wing-car (efectos suelo o efecto de ala invertida, que es como suele denominarse esta nueva técnica implantada por Colin Chapman en sus Lotus), al utilizar un doble efecto de este tipo. Al parecer, esa solución le fue ofrecida a Guy Ligier, propietario de la escudería francesa, por los técnicos del túnel de viento de París, adonde habían enviado el prototipo del vehículo. Los datos los habían obtenido los técnicos en aerodinámica tras el paso por el mismo túnel del Alfa Romeo .de fórmula 1, próximo a debutar, y la información dada a Ligier fue previa consulta a la casa italiana.

Además de esta avanzada técnica aerodinámica, los nuevos Ligier cuentan a su favor con el reducido peso del conjunto. Para lograr esa cura de adelgazamiento, Ligier ha tenido que recurrir a materiales conocidos, pero muy caros, que el resto de sus rivales no suelen utilizar precisamente por su elevado coste.

Con una estabilidad fuera de toda duda en los virajes, gracias a su aerodinámica, y un peso reducido que permite obtener superiores velocidades punta y aceleraciones más fulgurantes, el Ligier es un vehículo muy válido y capaz de ganar en cualquier circuito.

Ferrari: debut tardío, pero triunfal

Por su parte, el nuevo Ferrari entró en competición cuando ésta había comenzado ya. Su debut en Suráfrica pudo considerarse precipitado, porque no había cubierto más que unas pocas horas de entrenamiento en la pista particular que Ferrari posee en Fiorano. Pero los registros obtenidos en esas horas bastaron a los técnicos italianos para confirmar la calidad del nuevo monoplaza.

En su primera carrera la prestigiosa escudería italiana logró batir a los hasta ese momento máximos favoritos, los Ligier. Un doblete inapelable, con Villeneuve en el papel de protagonista, aumentaba la dosis de sorpresas de esta temporada, ya de por sí rica en ellas.

En su segunda carrera, disputada hace sólo unos días en el circuito urbano californiano de Long Beach, nuevamente los Ferrari demostraron una superioridad notable. En esa carrera, el triunfo italiano sí que estaba algo más previsto, en parte por su actuación previa y en parte también por el hecho de que los neumáticos que equipa Ferrari, los Michelin, son especialmente aptos para ese complicado trazado americano.

Así pues, van cuatro carreras celebradas y se registra empate a dos victorias entre Ligier y Ferrari, con un tremendo equilibrio entre ambos. Por parte de los pilotos existe una ligera superioridad en favor de Villeneuve, que comanda la clasificación con dos puntos de ventaja sobre Laffite. Pero ¿qué pasará en las siguientes?

La próxima prueba puntuable se celebrará en el circuito madrileño del Jarama, el día 29 de este mes de abril. En el lento y tortuoso trazado español, el equilibrio de fuerzas entre Ligier y Ferrari, entre Laffite y Villeneuve, puede romperse. Por ahora, el francés ha conseguido en el curso de unos entrenamientos privados en el Jarama colocar el cronómetro en un sensacional 1-14-9, muy por debajo de los tiempos realizados por los otros pilotos que participaban en los entrenamientos.

Ese tiempo, logrado además con ruedas duras -no con los neumáticos especiales de calificación que utilizan estos monoplazas cuando quieren conseguir un tiempo especialmente bueno-, parece dar cierta ventaja a Ligier. Pero restan aún por realizar esas pruebas privadas a Ferrari y Renault -la marca francesa probará un nuevo modelo del que se espera mucho-, y Villeneuve no ha dicho aún su última palabra.

Sea como sea, el duelo no debe quedar centrado sólo a estos dos hombres o a estos dos equipos. Y no sólo porque en una carrera de fórmula 1 los imponderables juegan una baza muy importante, a veces decisiva, sino porque también hay pilotos y vehículos capaces de lograr el triunfo en cualquier momento. Es el caso de Tyrrell, Wolf, Brabham, etcétera. Incluso del revolucionario Lotus-80, que va a sustituir precisamente en el Jarama al modelo ganador del campeonato del pasado año -el cual, hoy día parece superado- y que no ha encontrado aún su correcta puesta a punto. Esto ha levantado críticas hasta por parte de Mario Andretti, que se ha puesto algo nervioso pensando que si con el modelo 79 ya no puede ganar y -con el 80 tampoco, en esta temporada puede fácilmente perder el titulo