Salones de juego en los barcos de Trasmediterránea

Los barcos de la compañía Trasmediterránea que cubren las líneas de la Península a las islas, tanto Baleares como Canarias, y la travesía del estrecho de Gibraltar instalarán en algunas de sus salas distintos tipos de juegos de azar, incluidos en el catálogo de juegos. Los barcos se convertirán de esta forma en casinos en el mar. La solicitud presentada por la compañía Trasmediterránea -sociedad dependiente del Patrimonio del Estado- ha sido autorizada por la Comisión Nacional del Juego en su última reunión, pese a la oposición de algunos casinos ya instalados. Los salones de juego de los barcos estarán a disposición de los viajeros y funcionarán en el tiempo de la travesía, pero no estarán abiertos en los períodos de atraque de los barcos en puerto, para evitar una posible competencia de los barcos con los casinos instalados en tierra.Trasmediterránea es una compañía que goza de una subvención del Estado para cubrir sus déficits desde antes de pasar a manos del sector público. Este año la subvención a Trasmediterránea será del orden de 5.000 millones, un 25% para nuevas inversiones y el resto para cubrir déficits. La instalación de juegos en los barcos se estima que, además de generar ingresos directos a la cuenta de explotación estimulará la demanda y aumentará la ocupación de los barcos. Las cuentas presentadas a la Comisión Nacional del Juego consideran razonable esperar que, anualmente, los barcos de Trasmediterránea pueden conseguir unos ingresos brutos por el juego (ruleta, máquinas tragaperras, chemin de fer, bingo y demás modalidades) del orden de los mil millones de pesetas, de los cuales unos cuatrocientos podrían ser beneficio neto para la compañía. En la solicitud de la concesión se plantea que los ingresos por el juego supondrán disminuir la subvención presupuestaria a la compañía.

Trasmediterránea ha concedido a un casino instalado en Barcelona la concesión de la explotación de los salones de juego de los barcos.