Suárez no acepta el debate en RTVE solicitado por Felipe González

El presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, expresó anoche su negativa a realizar el debate en RTVE solicitado por el líder del Partido Socialista, Felipe González, y también por otros partidos, en base al argumento de que no sería beneficioso para el país, porque sólo contribuiría a aumentar la confusión. El señor Suárez afirmó que considera imprescindible la continuidad de UCD en el Poder para solucionar los problemas del país y presentó a su partido como máximo exponente de las libertades democráticas.

El presidente del Gobierno se incorporó de nuevo a la campaña electoral, con rápidas visitas a Bilbao, Zaragoza y Valencia. En la capital de Vizcaya no hubo incidentes ni reacciones de simpatía; Adolfo Suárez llegó casi de incógnito a Bilbao, se reunió con la ejecutiva de su partido, recorrió un trecho de la calle General Concha y visitó al delegado de Agricultura, herido en un atentado. Mejor acogida tuvo el presidente en Zaragoza, donde asistió a un almuerzo con un millar de comensales; el ministro de Hacienda, señor Fernández Ordóñez, que encabeza la candidatura centrista de dicha provincia, elogió ampliamente, «por primera vez en mi vida», al señor Suárez, quien a su vez confirmó que ésta era la primera vez que oía al ministro algo parecido.Por su parte, el secretario general del PSOE, Felipe González, insistió en todos sus mítines en la necesidad de mantener la calma ante la posibilidad de un Gobierno socialista después de las elecciones, hecho que consideró un cambio histórico para nuestro país. El líder socialista visitó ayer, -entre otras, la provincia natal de Adolfo Suárez, y dijo que de lo que se trata el 1 de marzo es de obtener 176 diputados de izquierda y derrotar a la derecha. Asimismo pidió apoyo para las fuerzas de seguridad, al referirse al nuevo asesinato cometido ayer.

Mientras tanto, Santiago Carrillo, secretario general del PCE, ha recrudecido sus ataques contra el PSOE, al afirmar que, «si se produjese un debate público, se entenderían mejor Adolfo Suárez y Felipe González que González y Tierno Galván», además de acusar al Partido Socialista de buscar el voto del empresario y de la derecha.

La Confederación de Organizaciones Empresariales (CEOE) distribuyó, por su parte, una nota en la que afirma que no pueden aceptarse opciones políticas que potencien centrales sindicales o que consideren al sector público como motor de la economía.

Páginas 13, 14 y 15