No habrá pacto antes de 1979
El optimismo con que se cerró la sesión de prenegociación del miércoles entre sindicatos mayoritarios y Gobierno quebró ayer, después de la reunión de los representantes de Economía con los de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). El optimismo se centraba en la posibilidad de una inmediata reunión tripartita con carácter netamente negociador. No será así. Ha aparecido un nuevo instrumento de conversación denominado mesa que va a suponer un alargamiento de las discusiones para unificar criterios, que no producirán previsiblemente un acuerdo antes de 1979.Después de la tanda de reuniones de ayer y el día anterior se han constituido seis mesas con carácter sectorial y representaciones en general bilaterales que van a tratar de unificar criterios, políticas y objetivos. Las posiciones de patronal y sindicatos parecen poco conciliables, y en el fondo de todo sigue estando el tema del calendario político que condiciona la actitud de las fuerzas sociales y del propio Gobierno.
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Comités sectoriales para acercar las posturas para alcanzar el pacto
(Viene de primera página)Las mesas creadas en principio son las siguientes: Comité Tripartito Institucional -parece ser la más trascendente-, referido a la regulación de las relaciones laborales. Carlos Ferrer, presidente de CEOE, señaló ayer en este punto que en materia de flexibilidad de plantillas la CEOE no pretende más de lo que ya existe en la legislación de los países europeos.
La mesa de crédito y financiación estará integrada por representantes de banca privada, oficial, cajas y CEOE. Se reunirá a principios de la próxima semana. La mesa de inversión, empleo y apoyo fiscal estará integrada por representantes de Hacienda y CECIE. La mesa de fomento de exportación queda pendiente de definir. Mesa de patrimonio sindical, que contará con participación de patronal, sindicatos y Gobierno. Carlos Ferrer indicó ayer que se hablará de reparto y no de devolución. Por último, la mesa de convenios colectivos, que abordará los temas relacionados con la negociacilón de los próximos convenios.
Divergencias salariales
En cuanto a los topes salariales, las divergencias se mantienen en términos similares a lo que ocurría hace unas semanas. El Gobierno acepta un aumento del 12 ó 13%, al margen del impacto de las nuevas normas fiscales de retención de impuestos. La patronal insiste en limitar el aumento al 10 ó 12%, según productividad. Las centrales reclaman en tomo al 16%.
Al terminar la sesión de ayer Carlos Ferrer señaló, entre otras cosas, que la flexibilidad de plantillas es fundamental para las pequeñas y medianas empresas (97,7% de las afiliadas a CEOE), y afirmó que comparte la opinión de Felipe González de que España necesita unos sindicatos fuertes.
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