Prohibido el uso partidista de la bandera nacional

El Consejo de Regencia que, durante la ausencia del Rey, sustituye a don Juan Carlos en la Jefatura del Estado, se reunió ayer en el Palacio de las Cortes. Entre otros asuntos despachados, el Consejo de Regencía firmó un real decreto, aprobado ayer mismo por el Consejo de Ministros, por el que se prohibe el uso de la bandera nacional con fines partidistas.A la reunión del Consejo de Regencia asistieron sus tres miembros, el presidente de las Cortes y del Consejo del Réino, Antonio Hernández Gil; el teniente general Luis Díez-Alegría, y el presidente del Tribunal Supremo, Angel Escudero del Corral. La reunión, celebrada en el despacho oficial del señor Hernández Gil, duró aproximadamente tres cuartos de hora.

Aunque no se facilitó información oficial sobre lo tratado, EL PAIS pudo saber de fuentes enteramente solventes que el Consejo de Regencia firmó el real decreto citado, que aparecerá en fecha inminente en el Boletín Oficial del Estado.

El anuncio de que el Gobierno dictaría una disposición prohibiendo el uso partidista de la bandera nacional, fue hecho por el minlistro del Interior, Rodolfo Martín Villa, el pasado 31 de mayo, en un almuerzo celebrado con periodistas por iniciativa del decano del Colegio de Abogados de Madrid, Antonio Pedrol. Dos días después, en la reunión del Consejo de Ministros, el Gobierno aprobó un real decreto, por el que se fijaban las circunstancias y lugares en que podrá y deberá exhibirse la enseña nacional, así como las prohibiciones impuestas a su utilización y las sanciones en que podrán incurrir quienes falten al debido respeto a la bandera «o pretendan instrumentalizar parcialmente un símbolo, que es patrimonio común de todos los españoles».

Normas para su uso

El Consejo de Ministros celebrado ayer se ocupó de nuevo del tema y, a propuesta del ministro de la Presidencia, aprobó un real decreto -remitido inmediatamente después al Consejo de Regencia para su firma- que prohíbe concreta y expresamente a los partidos políticos y asociaciones sindicales o de otra índole «la utilización de la bandera de España o de sus colores como símbolo, distintivo o diferenciador», según la información facilitada.Asimismo se prohíbe la utilización de la bandera de Esapaña en manifestaciones o concentraciones por los indicados grupos y se permite tan sólo el uso de «una bandera de España colocada en lugar preeminente sobre los distintivos de grupo y previa autorización». La información facilitada anoche por el Gobierno sobre este decreto termina afirmando que con él «se pretende que la bandera de España, que es patrimonio y símbolo para todos los españoles, no pueda ser apropiada indebidamente para fines partidistas».

Las últimas ocasiones en que, de modo profuso, se utilizó la bandera nacional de forma partidista fueron las recientes manifestaciones de la ultraderecha tras el acto celebrado en la plaza de Oriente con motivo del tercer aniversario de la muerte de Franco.