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Una ola de nostalgia salazarista comienza a invadir Portugal

Como el año pasado, la fecha del 1 de diciembre -aniversario de la restauración de la independencia frente a Castilla en 1640- ha sido el pretexto para la convocatoria de una manifestación derechista en las calles de Lisboa.

Pero este año la manifestación se inscribe en un fenómeno mucho más amplio, que un analista político poco sospechoso de simpatías de izquierda describe así: «Una ola creciente de derecha reaccionaria y revanchista, que ostenta ya sin pudor los emblemas del pasado y los motivos míticos de su acción secular, y que sólo tácticamente tolera aún la máscara de la democraciaLos nostálgicos del pasado hablan hoy en voz alta, y el elogio abierto del salazarismo es la principal razón de ser de media docena de semanarios, algunos de presentación bastante cuidada y hasta lujosa. Basta echar una mirada sobre los escaparates de las librerías o sobre la cartelera de los espectáculos para hacerse una idea de la amplitud del movimiento. Los teatros de revista, por ejemplo -forma popular entre todas en Lisboa anuncian casi todos espectáculos que son un escarnio descarado contra el nuevo régimen. Sirvan de ejemplo algunos títulos y su publicidad: «Todo lo que S. Bento se llevó» (S. Bento es la sede del Parlamento), con este comentario: « El respetable público es avisado que cierta crítica consideró este espectáculo como reaccionario y fascinante». «Vuelta hacia la derecha: una revista de acuerdo con la voluntad popular», «El risolucionario», «Un cero a la izquierda», etcétera. Directores y realizadores se justifican afirmando que tienen que obedecer, las exigencias del público...

Varias editoriales se dedican, casi exclusivamente, a la publicación de obras de los próceres del anterior régimen o de sus panegiristas, y varios de éstos libros figuran entre los best-sellers del momento. El último libro de Marcelo Caetano, «Las constituciones portuguesas», ocupa lugar de honor en todas las librerías y la editorial lo anuncia como obra del «mayor especialista portugués en Derecho. constitucional », lo que «autoriza», la opinión del ex primer ministro, según la cual «la Constitución de 1933 era más democrática que la de 1976 ».

Llaveros de Salazar

También se puede comprar por unas veinte pesetas un bonito llavero con las figuras de Salazar y Caetano. Si el éxito no es grande, tampoco se registran reacciones contrarias o siquiera extrañeza entre los transeúntes.Más inexistente aún, más peligrosa también, para unas masas despolitizadas y abrumadas por las dificultades del día a día es la exaltación de los «buenos viejos tiempos», en que «las Naciones Unidas nos condenaban todos los días, pero a los portugueses les importaba un comino esto, comiendo bacalao tres veces por semana y cambiando sus escudos por el mundo entero como si fueran francos suizos», como escribe esta semana el editorialista de un semanario derechista, porque ya se dice abiertamente que el fascismo -así, llamado- fue tiempo de felicidades y de paz. De todo es culpado el nuevo régimen: del aumento de los precios y del consumo de droga, del paro y de la delincuencia, de la suciedad de las calles, de la pornografía, de la falta de educación de los jóvenes de hoy y del pésimo estado de las carreteras...

El mito del imperio y de la grandeza perdida es otro tema favorito de la derecha nostálgica. Sus publicaciones no saben a quién dedicar los insultos más soeces, de una grosería inaudita: si a los nuevos regímenes africanos (que son diariamente piropeados de sanguinarios, salvajes, social- fascistas y... analfabetos) o si a los Gobiernos y a los militares responsables de la descolonización, a quienes se promete un «nuevo juicio de Nuremberg».

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Estas son algunas manifestaciones, las más groseras tal vez del «salazarismo cotidiano» que campea en el Portugal de 1978.

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