El Hospital Civil de Basurto podría presentar suspensión de pagos

El hospital civil de Basurto (Bilbao), que venía absorbiendo al 45% de los enfermos de la Seguridad Social de Vizcaya, podría ir a una suspensión de pagos si de una forma urgente el Ministerio de Sanidad no ratifica el convenio que el centro tiene firmado con el Instituto Nacional de Previsión (INP) desde el mes de junio pasado. Portavoces cercanos a la gerencia del hospital declararon a EL PAÍS que este mes se ha podido hacer efectiva la nómina, pero que las arcas del centro no podrán hacer frente al pago de salarios del mes de noviembre si no entra en vigor el convenio aludido.Desde 1952 el hospital de Basurto -que cuenta en la actualidad con 1.100 camas- tiene concertado con el INP un contrato de asistencia sanitaria a los beneficiarios de la Seguridad Social. El desequilibrio entre las actuales cotizaciones de aquellos y los costos reales por cama y día habían llevado en 1977 al hospital a un creciente proceso de descapitalización.

Para estudiar este problema se creó, a finales del año pasado, una comisión mixta INP-hospital, que dictaminó que el precio real por enfermo y cama del centro debía ser de 5.200 pesetas (en la actualidad se mantiene la cuota de 3.375 por día). El 16 de junio de 1978 se firmó, finalmente, entre el INP y los representantes del hospital, un convenio con las citadas condiciones económicas. Se preveía un carácter retroactivo para el misnio desde el 1 de diciembre de 1977, con cinco meses después el convenio aún no ha sido ratificado por el Ministerio de Sanidad.

Ante esta situación, la dirección del centro, a partir del 29 de octubre, decidió cobrar la asistencia médica a los beneficiarios de la Seguridad Social. En aquellas fechas el hospital denunció una deuda, contra el convenio, por parte del INP, de 320 millones de pesetas, resultantes de la diferencia existente entre el precio actual y el fijado en convenio por cama y día (1.825 pesetas) desde el 1 de diciembre de 1977.

El hospital civil de Bilbao, con ochenta años de antigüedad, tiene un presupuesto anual de 1.559 millones de pesetas. El mantenimiento diario viene a costar de tres a cuatro millones, a los que, hoy por hoy, no puede hacer frente por sus propios medios.

«Acabo de regresar de Madrid y mi impresión es pesimista -declaró, ayer el director del centro-. Nuestra situación es difícil y el mes que viene si no nos ratifican el convenio no podremos pagar la nómina. En el Ministerio me han dado buenas palabras y me han han asegurado que el asunto puede arreglarse en algunos días. Eso ya me lo dijeron la semana pasada.»