Dos centros culturales pueden desaparecer por problemas económicos
Dos centros culturales juveniles de Madrid, el Migrans, de San Blas, y el Mantuano, en Prosperidad, no pueden desarrollar sus actividades al ritmo previsto por las dificultades económicas por las que atraviesan, pese a las promesas de subvenciones hechas por el Ministerio de Cultura, según denunciaron ayer en rueda de prensa los representantes de las entidades juveniles encargados de la gestión de dichos centros.Aunque la raíz de los problemas sufridos en ambos centros sea sustancialmente la misma, en el centro de San Blas las dificultades primeras son fundamentalente económicas; mientras que en Prosperidad son de carácter administrativo, debido a que tanto Ayuntamiento como Cultura reivindican la propiedad del centro.
Seis millones
«En julio del pasado año -explicaron los representantes de San Blas- el Ministerio de Cultura nos firmó el acuerdo de una subvención de seis millones de pesetas, que se invertirían en obras tan elementales como alumbrado y reconstrucción de las zonas deterioradas, entre otras cosas.» Con esa cantidad, las entidades juveniles podrían poner en funcionamiento diferentes tipos de actividades. «En un barrio de medio millón de habitantes como éste -añadieron- cualquier cosa que se haga tiene un amplio eco. La gente joven no sabe qué hacer y está deseando empezar aquí las actividades.»El local consta de cinco pisos y tres pabellones; para la conservación y control del centro fueron contratadas doce personas, con el visto bueno de Cultura, que desde el pasado mes de julio no han per cibido ni una sola peseta, según aseguraron los miembros de la coordinadora. «Al concedernos la gestión del centro -añadieron- nos dieron de plazo hasta diciembre para que esto empezara a funcionar. Desde entonces todo ha sido dificultades y ningún tipo de ayuda. Creemos que el Ministerio de Cultura nos pone todas esta dificultades para apartarnos del centro, pero no estamos dispuesto a secundarles el juego.»
Mantuano puede convertirse en escuela
«Nosotros no hemos tenido si quiera promesas de subvencione oficiales -explicaron los representantes del Centro de Mantuano- al margen de las dificultades económicas con que nos encontramos, nuestra mayor amenaza en estos momentos consiste en que el Ayuntamiento reclama la propiedad del centro para convertirlo en escuela. Este es un barrio en el que existen puestos escolares más que suficientes para el barrio. El Ministerio de Cultura nos ha prometido que realizará todas las gestiones posibles para que esto no ocurra, pero, de momento, las promesas no se han concretado en nada".En el centro de Mantuano funcionan actualmente más de noventa grupos juveniles diferentes, encargados de realizar todas aquellas actividades de interés para la juventud. Se calcula en 5.000 el número de personas que hace uso del centro.
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