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El anteproyecto de ordenanza laboral realizado por la Federación, un prodigio de ambigüedad

La comisión creada por el Ministerio de Trabajo para elaborar el proyecto de ordenanza laboral del futbolista -formada por miembros de la Federación y de la AFE -celebrará esta tarde una reunión de trabajo. La base de partida serán los trabajos presentados por Federación y AFE. El anteproyecto presentado por ésta es mucho más preciso que el de la Federación; el de esta última es un prodigio de ambigüedades.

La reunión de esta tarde corresponde al plan establecido por el Ministerio de Trabajo para estructurar la ordenanza laboral del futbolista. El Ministerio creó una comisión asesora cuyas partes, Federación y AFE, se comprometieron a presentar por separado, el pasado sábado, sus respectivos anteproyectos. La AFE lo hizo en el plazo previsto, pero la Federación no lo ha hecho hasta ayer.Tras leer uno y otro anteproyecto, la impresión es que la Federación se ha inspirado fielmente en el de la AFE, que lo ha leído con atención, lo ha recortado algo y, sobre todo, lo ha cargado de ambigüedades, hasta el punto de que lo que presenta es absolutamente inútil; hay que preguntarse por qué la Federación ha esperado a conocer el proyecto de la AFE para escribir el suyo: posiblemente porque se siente incapaz de crear uno por su propia cuenta. Porque si la Federación se sintiese capaz de afrontar esa tarea, el no haberlo hecho meses o años atrás indicaría claramente que no quería hacerlo. En definitiva, o no quiere o no puede hacerlo. O ambas cosas.

La AFE, en su proyecto, regula el derecho de retención según una fórmula concreta: los jugadores cuyos contratos finalizan antes de que hayan cumplido la edad de veinticuatro años sólo podrán ser retenidos hasta que cumplan esta edad. Aquellos cuyos contratos finalicen a la edad de veinticuatro, veinticinco o veintiséis años podrán ser rete nidos por una temporada más. Se establece una sustanciosa elevación del contrato para caso de retención: el 50 % en la primera temporada, el 40 % en la segunda, el 30 % en la tercera y el 20 % en la cuarta. El jugador tendrá derecho a oponerse a la prórroga si tiene oferta más sustanciosa por parte de otro club. El club de origen, en ese caso, podría retener al jugador sólo en el caso de que igualase dicha oferta. Si no es así, el jugador marchará a ese otro club, que a su vez debe satisfacer al de origen con un traspaso que será el quíntuplo de la cantidad a percibir por el jugador. Igualmente, el proyecto de la AFE es tablece el derecho de los jugado res a percibir el 20 % de los importes de los traspasos, y también el derecho a la propia imagen, a ejercer actividades sindicales y a utilizar para esto último los loca les de sus clubs. Propone, para los pleitos laborales entre clubs y jugadores, una comisión paritaria, compuesta por cuatro jugadores y. cuatro representantes de clubs. Si en esta comisión no se llegara a una solución, intervendría Magistratura de Trabajo.

El anteproyecto de la Federación, más breve, coloca su primera ambigüedad en el segundo artículo, que dice que «quedan excluidos de la aplicación de la ordenanza los actos, situaciones, servicios y relaciones que por su significado fundamentalmente deportivo deben tener su tratamiento y jurisdicción dentro de la normativa dictada por la Federación Española, por las regionales y por los demás organismos competentes». Lo que viene después son otros veintiún artículos que no ofrecen solución a los temas más importantes de la problemática planteada por la relación laboral club-jugador. El derecho de retención se regirá por las normas federativas; las demandas laborales las resolverán las normas federativas; las condiciones de los traspasos estarán sujetas a las normas federativas.

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