Primer "sex-shop" en Madrid
En la calle de Juan de Dios se abrió hace días el primer sex-shop de Madrid. En dos habitaciones pequeñas -cuidado con la cabeza al bajar las escaleras de la entrada- se exhiben por primera vez en Madrid, con plena legalidad, una mediana colección de vibradores, cremas relajantes o reafirmantes según gustos, películas pornográticas, diapositivas, y las más normales revistas y libros pornográficos, así como preservativos de colores y diversos objetos de regalo.En la legislación comercial española no figura la actividad de los sex-shop, por lo que la tienda ha tenido que ser registrada como librería menor, lo que tampoco es incierto desde el momento en que buena parte del género lo constituyen libros, novelas y revistas, todos de temática pornográfica.
La tienda lleva abierta apenas dos semanas y su aceptación ha sido considerable. Así, una de las cremas citadas puede costar entre cuatrocientas y ochocientas pesetas, pero las películas pornográficas, que se están vendiendo «como churros», oscilan entre las 2.500 y las 5.000 pesetas.
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