Once partidos políticos denuncian conjuntamente las agresiones de la extrema derecha

Once partidos políticos, desde la derecha a la extrema izquierda, hicieron público ayer en Madrid un comunicado conjunto en el que denuncian «la reiteración de los actos violentos contra el ejercicio de los derechos democráticos y las libertades ciudadanas producidos en Madrid por parte de la extrema derecha». Igualmente, los mismos partidos políticos se comprometen «a actuar solidariamente y con toda energía en aquellos casos en que se produzca cualquier hecho violento, venga de donde venga, que atente contra la convivencia democrática».

El comunicado conjunto se hizo público a las diez de la noche de ayer, al término de una reunión de cinco horas de duración celebrada en la sede madrileña de Izquierda Democrática. Los partidos firmantes fueron AP, ACL, PL, UCD, DC, ID, PSOE, PCE, PTE, ORT y Falange Auténtica.OIC, Partido Sindicalista, LCR, MC y Partido Carlista, que asistieron a la reunión, se negaron al final de la misma a firmar el documento. La razón aducida, al parecer, era el término arriba reseñado de «hecho violento, venga de donde venga» y concretamente de estas últimas cuatro palabras.

A la reunión, celebrada a nivel de Madrid, asistieron representantes de las ejecutivas madrileñas de los partidos.

La reunión, cuya importancia estriba en que asistieron a la misma representantes de todos los partidos políticos legalizados (con excepción de Fuerza Nueva y Falange de las JONS), fue posible gracias a una iniciativa adoptada por el Partido Comunista de España el pasado lunes, que fue secundada por el resto de los partidos. Izquierda Democrática, por su parte, se ofreció a prestar su sede para la reunión.

Sensibilización de la opinión pública

La reunión, que tenía dos puntos en su orden del día (solicitar de la Administración las medidas necesarias para que cesen los actos violentos por parte de la extrema derecha y sensibilizar a la opinión pública sobre estos hechos), se caracterizó por la falta de protagonismo de todos los partidos políticos asistentes. Los debates giraron en torno a la tesis del rechazo de la violencia como forma de intervención política y de la apología de la violencia como sistema de actuación de los partidos políticos. Otra de las tesis fue la de no responder en ningún caso a la violencia con la violencia. Se dejó claro, igualmente, que las medidas solicitadas a la Administración no pasen nunca por la limitación de la participación ciudadana ni se restrinjan las actividades políticas.

Los partidos firmantes, que representan a una gran mayoría del electorado, consideran «que corresponde a la Administración, y en concreto al Gobierno Civil de Madrid, la intensificación de las medidas que conduzcan a la erradicación definitiva de estas situaciones violentas» y prestan, a tal efecto, toda su colaboración. Al mismo tiempo, valoran positivamente el comportamiento «de la gran mayoría de los medios de comunicación social en su tarea de informar democráticamente y les instamos a acrecentar la defensa de los valores ciudadanos».

Aunque el comunicado no cita en ningún momento al partido Fuerza Nueva ni a Falange de las JONS, se sabe que la reunión estuvo motivada por la presunta escalada de violencia desencadenada en Madrid en los últimos meses por personas afectas a estos partidos y, de forma especial, por el primero de ellos.

De manera especial, se citó en el curso de la reunión las agresiones sufridas en las últimas semanas por miembros de partidos políticos, periodistas, asaltos a locales de partidos y asociaciones ciudadanas, hechos que se han acentuado últimamente con el acuchillamiento de dos estudiantes de la Escuela General de Policía.

No obstante, un portavoz del PCE que asistió a la reunión consideró que la situación actual en Madrid no había llegado todavía a un muy grave deterioro y que es todavía solucionable si se toman las medidas oportunas.

En cualquier caso, fue el presidente de Fuerza Nueva, Blas Piñar, quien se dio por aludido, en unas declaraciones efectuadas ayer a Radio Nacional de España, al serle preguntada su opinión sobre esta cumbre horas antes de que se iniciara. Blas Piñar dijo que «me parece absurdo y contradictorio que en nombre de la democracia pueda exigirse que nuestro partido sea disuelto». «En cuanto a la imputación de hechos punibles realizados por nosotros, puedo señalar dos cosas: en primer lugar, que si tal imputación no se prueba ante los tribunales competentes, es calumniosa. Y, en segundo término, que está claro, a juzgar por el acontecer de cada día, que la violencia y el terror que atemorizan a nuestro pueblo no es obra, precisamente, de Fuerza Nueva.»

Anoche no fue posible establecer contacto con ningún responsable de Fuerza Nueva para solicitar su opinión en torno a la reunión celebrada por el resto de las fuerzas políticas.

Fraga: "Desprecio hacia las agresiones rencorosas"

El líder de Alianza Popular, Manuel Fraga, hizo ayer unas declaraciones a la agencia Efe en las que responde a un artículo publicado ayer por el diario El Alcázar, en eI que se vertían acusaciones contra su persona, artículo firmado por el director de la publicación, Antonio Izquierdo.

«Para agresiones rencorosas e injustificadas guardo una reserva inagotable de desprecio». dijo Fraga.