Desciende el negocio

Las tres notas que caracterizan la semana bursátil son: el descenso del volumen de contratación, las diferencias cortas en los cambios y la irrupción de varias ampliaciones de capital.La inactividad de los días precedentes se acentuó en esta tanda al haber una fiesta en medio. Sin embargo, al revés de lo que ocurría en otras épocas, no se ha aprovechado para dar un tirón, sino que se ha dejado el mercado al libre juego de las contrapartidas, y como no había ni oferta ni demanda definidas, la evolución de los precios ha sido discreta.

En cuanto a los desdobles, también han incidido en darle pesadez, ya que en conjunto sumaban unos requerimientos de capital cercanos a los 5.000 millones de pesetas, que se han dejado sentir en el parquet.

Por todas estas razones técnicas y alguna otra, como el entorno político en su vertiente parlamentaria, la Bolsa ha estado sosa y sin decantarse, lo cual no es malo en los momentos actuales, con el índice general madrileño 3,66 puntos por encima de la par con que, convencionalmente, iniciamos el ejercicio.

Los sectores con mejor comportamiento bursátil en la semana fueron los típicamente industriales, o sea, químicas y siderúrgicas. En cambio, los que registraron mayor desmerecimiento en sus índices fueron los bancos comerciales y las sociedades de inversión.