Carabanchel denuncia a la Delegación Provincial por quedarse con doce viviendas

La Asociación de Vecinos de Carabanchel Bajo ha denunciado la actitud de la Delegación Provincial de la Vivienda en el seno de la comisión encargada de repartir las viviendas oficiales construidas en Alcalá de Henares. El conflicto surgió cuando la Asociación de La Corrala renunció a ocho de las veinte viviendas que tenía adjudicadas, porque no le eran necesarias. Igual hicieron los vecinos de Alcalá de Henares respecto a cuatro pisos que no necesitaban.

Uno de los acuerdos por los que se regía el funcionamiento de la comisión, es que si por cualquier motivo sobraban viviendas, se repartirían equitativamente entre los barrios que aún no hubieran resuelto sus necesidades. Este es el caso de Carabanchel Bajo, quien ahora ha pedido algunas o todas de las doce viviendas libres y se ha encontrado con la negativa de la Delegación, quien argumenta que se las reservan para otros casos.

Los vecinos recuerdan que la Delegación ya reservó para sí un cupo muy importante de viviendas oficiales, destinadas a funcionarios y policías, cuando hoy por hoy el problema fundamental es erradicar el chabolismo en Madrid ayudando a las familias sin recursos.

Al margen del aspecto anterior, una comisión de vecinos de Alcalá, Carabanchel, Berruguete-Rastrillo, Vallecas y de la Asociación para el Desarrollo Gitano, acompañados por un arquitecto, visitaron las viviendas del polígono de la carretera de Madrid y observaron una serie de defectos de construcción importantes. El más grave sería la aparición de redondos en la malla de forjado en los techos, lo que puede provocar el deterioro progresivo de la estructura. De ahí, hasta el que los techos no tengan capa de yeso y se haya pintado directamente sobre el hormigón, hay una larga serie de inconvenientes.