"La primera misión del policía debe ser ayudar al madrileño"

Un albacetense de 57 años, Santiago Estrada, es el nuevo delegado de Seguridad y Policía Municipal del Ayuntamiento de Madrid, después de la llegada de José Luis Alvarez al cargo de alcalde. Para ello, ha pasado anteriormente por los puestos de director gerente de la Empresa Municipal de Transportes y de delegado de Circulación y Transportes. Sobre él recaen ahora dos ocupaciones de la máxima importancia: la Policía Municipal y los bomberos. Y no hay que olvidar que la policía es la directamente encargada de un tema tan polémico como la grúa.

Pregunta. Es casi obligado pedirle por la definición que usted le daría a la delegación a la que acaba de acceder.Respuesta. Los cometidos que esta delegación tiene vienen descritos formalmente por ley. Sin embargo, a nivel práctico, creo que todo el mundo puede ver cómo está dividida en dos grandes partes. Por un lado, la Policía Municipal, con sus cuatro subinspecciones, correspondientes a otras tantas misiones concretas (circulación, vigilancia en distritos, servicios especiales, tales corno vigilancia de la Casa de Campo o el Retiro, y la unidad móvil para cubrir el resto de las actuaciones). Además, la Policía Municipal se conceptúa, en estos momentos, como auxiliar de la Policía gubernativa. Y, por otro lado, está el cuerpo de Bomberos, con sus misiones de extinción de incendios, salvamento y socorrismo.

P. Es de suponer que llega a esta delegación con la intención de potenciar la actuación de estos cuerpos.

R. Por supuesto. Y puede que m¡ intención primera esté en la potenciación de los medios con que cuentan los bomberos, para conseguir dotarles de la infraestructura de instalaciones y equipamiento necesario.

P. ¿En qué consistiría esa mejora de los medios?

R. Puede que lo más importante sea la inauguración de dos nuevos parques, los de San Blas y Aluche, prevista para el mes de mayo. Pero queremos incluir también en la programación de este año la construcción del gran parque de Vallecas, que es una aspiración que ya viene de antiguo. Además, está el proyecto de realizar una instalación central que controle todo el servicio, una academia de bomberos y los hidrantes repartidos por toda la ciudad. Y, por supuesto, está la ampliación del material.

P. ¿Qué presupuesto sería necesario para acometer todos estos proyectos?

R. Así, de pronto, yo creo que anda por los 250 millones de pesetas la necesidad económica para poder acometer todo este plan, por llamarlo de alguna forma. Pero este dinero no lo tenemos ahora mismo. Es más, en el presupuesto municipal de este año, la única partida que se contempla con destino al cuerpo de Bomberos es de veinticinco millones de pesetas para material.

P. La Policía Municipal ha tenido graves problemas que incluso llevaron a propiciar una huelga que no llegó a efectuarse ante la militarización que fue decretada. ¿Continúan hoy esos problemas?

R. Los primeros problemas los estoy conociendo ahora, coincidiendo con los primeros contactos que estoy teniendo con ellos. Pero, en principio, mi opinión es que toda la policía funciona bien. Además, poco a poco, podremos ir consiguiendo que esos problemas sean cada vez menores para unas personas que se pasan el día en la calle, intentando,.con su trabajo, ayudar al madrileño que pienso que debe ser su primera misión.

P. ¿Qué proyectos hay para la Policía?

R. Con un poco de imaginación son muchos los servicios que la Policía Municipal puede cumplir en un momento dado. Yo he pensado en dos que habrán de ser estudiados antes de convertirse en realidad. Primero, estaría la posibilidad de, potenciando la utilización de la ¿misora central, en conexión con las eraisoras de radio comerciales, establecer un servicio de ayuda al automovilista para que, en todo momento, estuviera perfectamente informado de cómo está la circulación y de qué desvíos podrían efectuarse por agilizarla. El segundo servicio podría ser el utilizar a los monitores de la escuela de la Policía para que instruyeran a los niños mayores de los colegios para que éstos regularan el tráfico frente a los mism os, a la hora de entrada o de salida de clase.

P. El alcalde anunció el otro día una utilización más racional de la grúa. ¿Cómo se hará?

R. Se van a establecer seis casos, de los doce en que la grúa puede ser utilizada legalmente, en los que su actuación sea prioritaria. Serán cuando el vehículo esté es tacionado en lugares reservados a servicios de urgencia, frente a la entrada de un garaje, en los carriles bus, en las zonas de carga o descarga, en un lugar donde impiden un giro normal en la circulación o en doble fila. Los otros seis casos son los que menos perjuicios causan y, por tanto, la utilización de la grúa en ellos se hará mucho más esporádicámente.