Aplazada la reestructuración de Babcock Wilcox

En una entrevista que duró desde las doce de la noche del jueves hasta las seis de la mañana de ayer, el comité de empresa de Babcock Wilcox logré del consejo de administración de la empresa la promesa de que en la junta general de accionistas -que se celebró a mediodía de ayer en Bilbao- no se sometería a aquélla ni la venta de la sección de productos tubulares de la factoría ni la reestructuración prevista por la dirección, que dejaría sin trabajo a casi un millar de los 5.000 trabajadores de la plantilla.Con esta decisión, el consejo de administración paraba el golpe que hubiera significado la prometida marcha de los trabajadores sobre el hotel donde se iba a realizar la junta general de accionistas.

Al término de la reunión con el consejo de administración de Babcock, un miembro del comité de empresa declararía a EL PAIS: «Se ha logrado detener una medida que hubiera puesto en peligro los intereses de la fábrica y de los trabajadores, pero la crisis se mantiene, la solución a la misma está en el aire y nada se sabe sobre el futuro de la misma.»

En la junta general de accionistas se ratificaron las gestiones llevadas a cabo por la Administración, autorizando al consejo de administración para concertar créditos con garantía hipotecaria sobre bienes propios de la sociedad. Asimismo se facultó al consejo de administración para que efectúe en una o varias veces ampliaciones de capital social, de acuerdo con los términos del artículo 96 de la ley de Régimen Jurídico de Asociaciones Anónimas, dentro del plazo de cinco años, sin que en total pueda exceder de la mitad del capital desembolsado, mediante la emisión de acciones ordinarias a entregar total o parcialmente con cargo a reservas a los antiguos accionistas.