Geólogos catalanes, contra la exclusión del Meditérráneo en la ampliación a 200 millas de las aguas españolas
Cincuenta y cuatro profesores de Geología de la Universidad de Barcelona han firmado un manifiesto sobre la «sospechosa excepción en la ampliación de las aguas jurisdiccionales» en lo que respecta al mar Mediterráneo. El manifiesto parte de una dura crítica al proyecto de ley, aprobado ya por la Comisión de Presidencia del Congreso, por el que se amplían a doscientas millas náuticas las aguas jurisdiccionales españolas en el océano Atlántico y el mar Cantábrico, pero no en el mar Mediterráneo.«Tenemos sospechas bien fundamentadas -afirman los geólogos- de que el problema real que esconde esta exclusión es la importancia que ya tiene, y que aumentará en el futuro, la cuenca mediterránea como fuente de recursos energéticos, es decir, petróleo y gas natural.»
Al fondo, petróleo
Más adelante agregan: «El compás de espera en la ampliación de las aguas jurisdiccionales en el Mediterráneo nos hace pensar que existen fuertes presiones sobre el Gobierno, por parte de las compañías petrolíferas multinacionales que operan en el Mediterráneo desde hace unos años y quizás por parte de algunos Gobiernos. Pensamos que la cuestión es lo suficientemente importante y ha de ser considerada con mucho cuidado por las fuerzas políticas, ya que de ella depende en buena medida la independencia económica de nuestro país.»Los firmantes dan una gran importancia a los recursos energéticos de la zona que podría ser de soberanía española si el proyecto de ley contemplara también al Mediterráneo. Afirman en concreto que «hoy se conoce, tanto en medios próximos a la profesión geológica como, sin duda, en las compañías petrolíferas, la existencia de yacimientos marinos de petróleo y gas, localizados principalmente en el contacto secundario-miocénico de una antigüedad aproximada de diez millones de años. Esta antigua cuenca mediterránea ocupa actualmente una superficie que sé extendería desde Almería y las costas norteafricanas a Tarragona y las islas Baleares, y posiblemente continuaría hacia el sur de Italia y Chipre, por lo tanto, buena parte de la cuenca se encontraría dentro de las aguas jurisdiccionales del Estado español si fuesen ampliadas a doscientas millas».
El manifiesto incluye una llamada a los diputados y senadores precisando que «la democracia ha de servir también para recuperar el control sobre nuestros recursos naturales, y por ello esperamos que, cuando el proyecto de ley pase al Pleno del Congreso y al del Senado, nuestros políticos sepan poner por encima de cualquier tipo de presión los intereses de nuestro país».
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