Tarradellas: "Cataluña no puede ser tratada como la Mancha"

«Es curioso que algunas zonas de España hayan recordado la necesidad de unas libertades autonómicas para sí mismas en el momento en que Cataluña pide esas libertades», manifestó ayer el presidente de la Generalitat, Josep Tarradellas, en el curso de una rueda de prensa.

Sobre el mismo tema, Tarradellas manifestó también que «hemos de procurar que esas autonomías (de otras zonas de España) no sirvan para minimizar la autonomía de Cataluña». Precisó que «la Administración del Estado (español) está en manos de estos países (de España) que ahora dicen que quieren la autonomía, mientras que los catalanes en cuarenta años no hemos tenido ningún ministro». A todo ello añadió: «Cataluña no puede ser tratada como La Mancha.»Tarrádellas se refirió a la mala acogida que han tenido fuera de Cataluña unas recientes declaraciones suyas a un vespertino barcelonés. Al respecto aludió a «una campaña de Radio Nacional de España, que recogió parte de mis declaraciones, pero no las últimas palabras».

Tarradellas quiere «conocer previamente» la información

Con relación a las manifestaciones de Josep Benet, críticas para Tarradellas y a la Generalitat provisional, dijo que el senador «tiene derecho a opinar como le parezca; son en todo caso los partidos que le apoyan los que han de contestar. La Generalitat tiene una política y Benet tiene otra».Sobre la ya oficialmente anunciada creación de una dirección general de prensa, radio y televisión, adscrita a la presidencia de la Generalitat, el presidente Tarradellas dijo que no deseaba que «las informaciones fuesen controladas pero sí conocidas (assabentadas) por la Generalitat. Esto podría crear una situación objetiva en que la libertad de prensa llegase a ser mucho más limitada en Cataluña que en el resto de España.

Sobre el traspaso de servicios a la Generalitat, Tarradellas manifestó que creía que las funciones de las diputaciones serían fáciles de transpasar, pero que, en cambio, en las del Estado, «sería difícil, muy difícil». Distinguió entre el Gobierno y los funcionarios de la Administración, aludiendo con simpatía al primero y con una cierta prevención con relación a los segundos. Reconoció que recientemente había discrepado con el Gobierno Suárez sobre las vicepresidencias de la comisión mixta con el Estado. Tarradellas se inclinaba, en este tema, en favor de una sola vicepresidencia, para el catalán Sureda, pero el Gobierno impuso dos, la otra para el ministro para las Regiones.

El embajador norteamericano no habló de los comunistas

Tarradellas se refirió a su reciente entrevista con el embajador de Estados Unidos Unidos de América. Afirmó que este no había aludido en ningún momento al tema de la presencia de comunistas en el Gobierno de la Generalitat, cosa que «tampoco le habría permitido que hiciese». A continuación informó de sus próximos viajes por Cataluña.También el lunes se reunirá el Gobierno autónomo de la Generalitat. Uno de los temas del orden del día es el posible nombramiento de altos cargos. Al respecto EL PAÍS ha sabido que algunos ministerios autónomos contarán con cinco direcciones generales y otros, con sólo tres. De entre los muchos nombres barajados ya cabe añadir la casi certeza de que la importante dirección general de economía será confiada a José Luis Oller, quien fue profesor de la facultad de Económicas de Barcelona, para pasar posteriormente al grupo del Banco Urquijo, y, finalmente, a una gran empresa multinacional.