Los sindicatos rechazan unánimemente el proyecto de ley sobre acción sindical
«El proyecto de ley responde a la política del Gobierno en el campo de las, relaciones industriales, que, como otras veces he dicho, se inspira en el postulado del protagonismo de los trabajadores y empresarios, asumiendo las dos partes la responsabilidad de las negociaciones y de los acuerdos», ha declarado a Europa Press el titular de Trabajo, señor Jiménez de Parga, a propósito del reciente envío a las Cortes del proyecto de ley sobre acción sindical en la empresa, cuyo contenido íntegro ofrecemos en las dos páginas anteriores.Agrega el ministro de Trabajo que el Gobierno espera y desea que con la nueva ley se potencie el correcto funcionamiento de las empresas. En su opinión, el contenido de la norma legal no favorece a los trabajadores, «sino que, simplemente, se limita a reconocer sus derechos y ampararlos en debida forma».
Por otra parte, los sindicatos continúan haciendo públicas sus respectivas reacciones ante el referido proyecto de ley, sobre el que coinciden en señalar la falta de consulta para su elaboración a las partes en él implicadas, es decir, empresarios y trabajadores.
Concretamente, CCOO denuncia el comportamiento unilateral del Gobierno, después de que las Cortes -por mayoría M partido en el poder- rechazaran sendos proyectos de acción sindical, presentados por el PSOE, y sobre el código de los derechos de los trabajadores, elaborado por el PCE.
Señala también CCOO la ausencia de tratamiento del derecho de huelga en el citado proyecto de ley, así como el olvido que dicha noma hace de la constitución y funciones de las secciones sindicales de empresa.
En cuanto a su contenido concreto, Comisiones Obreras considera que las funciones y garantíais que se reconocen al comité de empresa y a los delegados de los trabajadores se mantienen en prindipio en parecidos términos a los ya reconocidos al sindicato vertical «y no responde, por tanto, a nuestro deseo de que la democracia entre en las empresas».
CCOO concluye señalando el factor de confusión que puede su poner la presentación a las Cortes del citado proyecto de ley en los actuales momentos, en los que ya está en marcha la campaña electoral, lo que hace suponer un nuevo intento gubernamental de minimizar las actuales elecciones sindicales.
Por su parte, la CSUT considera que el proyecto de ley supone una serie de restricciones a la libertad sindical y a los mínimos derechos democráticos de los trabajadores, para hacer posible de esta manera la imposición de los pactos económicos a la clase trabajadora.
Tras señalar aspectos concretos del proyecto que a juicio de la CSUT son censurables, esta central concluye su comunicado al respecto señalando su esperanza de que los parlamentarios de izquierda aúnen sus posiciones y no permitan que «este proyecto ahora se convierta en ley, pues en este caso ataría de pies y manos a los trabajadores para la defensa de sus intereses».
La USO limita su comunicado sobre el proyecto de ley a señalar las restricciones y omisiones que, a su juicio, contiene el referido texto. Entre las limitaciones, USO señala la exclusión de la representación obrera al personal civil empleado en establecimientos militares y obligación de que las asambleas sean convocadas, para que se consideren legales, por los comités o delegados de los trabajadores.
Finalmente, el SU considera el proyecto un nuevo atentado a la, libertad sindical y señala que, unido al anunciado proyecto sobre flexibilización de plantillas, «la ofensiva antidemocrática del Gobierno es ya alarmante».
No hubo anormalidades laborales en el sector del metal, de Navarra, que agrupa a 30.000 trabajadores, al desconvocarse en el último momento, tras una entrevista con la comisión negociadora de la patronal, los paros anunciados como medida de presión.
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