Roban seis escopetas repetidoras en el atraco a una armería

Durante la tarde del jueves y la mañana de ayer fueron asaltadas una armería, una administración de lotería y una tienda de decoración en donde los asaltantes se apoderaron de armas en el primer comercio y dinero en los otros dos, por una cantidad cercana a las 400.000 pesetas.

Sobre las ocho de la tarde del jueves, tres jóvenes, armados con dos revólveres y una escopeta de cañones recortados, asaltaron la armería Peñuelas, SA, sita en la calle de los Reyes, 15. En el momento del atraco se encontraban en el interior del local el propietario y dos empleados que fueron amordazados y atados en las dependencias traseras del comercio.Posteriormente, y según denunció uno de los empleados en la comisaría, los asaltantes se apoderaron de seis escopetas repetidoras del calibre doce, expuestas, y por tanto, sin las piezas que permiten la utilización de las armas. Al darse cuenta de ello, los jóvenes atracadores amenazaron de nuevo a los amordazados para que les informaran en dónde se encontraban las citadas piezas.

Una vez obtenidas éstas, los delincuentes se apoderaron de catorce cajas de cartuchos del mismo calibre y 6.000 pesetas que se habían recaudado durante el día. En medios policiales se cree que el robo fue realizado por delincuentes comunes.

Una hora después, otros dos jóvenes asaltaban una administración de lotería en el paseo de la Florida, 29; en esta ocasión iban armados con pistolas con las que amenazaron a María Concepción Velasco, propietaria del establecimiento, y a dos de sus hijas.

Tiroteo y huida

Cuando huían a pie con un botín cercano a las 200.000 pesetas, los atracadores fueron vistos por dos policías municipales que hicieron uso de sus pistolas al ver que ante el alto dado los atracadores sacaban el arma para disparar. En el tiroteo que se produjo no resultó herido nadie, aunque por la precipitación de la huida, los asaltantes se vieron en la obligación de dejar abandonado parte del dinero.El tercero de los atracos fue cometido ayer en una empresa de construcción, Stuplan, sita en la calle Cavanilles, particular, número 2.

Tres personas armadas con pistolas y armas blancas amenazaron a cinco empleados que se encontraban en el comercio y tras penetrar en la oficina se apoderaron de 200.000 pesetas que acababan de sacar dos de los directivos del banco para pagar la nómina semanal a los albañiles.

En este atraco los asaltantes cometieron, sin embargo, dos fallos, ya que sólo se llevaron la mitad del dinero existente y uno de los atracadores fue reconocido como un antiguo empleado de la empresa, que dejó de trabajar en el pasado mes de febrero sin que diera razón alguna. Este hecho fue puesto en conocimiento de la policía, al presentar la denuncia correspondiente.

Uno de los directivos de la compañía informó a EL PAIS que instantes antes de que entraran los asaltantes, habían guardado el resto del dinero, otras 200.000 pesetas, en un cajón, motivo por el que no fue sustraído, a pesar de que los atracadores obligaron al contable a abrir la caja fuerte que estaba vacía.