Desatención significativa
El éxito de la I Media Maratón, Popular organizada en Madrid por el C. D. Moratalaz debe mover a reflexión. La Federación Española de Atletismo se desentendió de ella «olímpicamente», y sólo a última hora algunos de sus miembros, por amistad, colaboraron.Quizá la Federación pensó que este ensayo iba a ser un fracaso. En este país siempre se subestima la capacidad popular y en el caso que nos ocupa las ganas latentes de hacer deporte. Se habla mucho y demagógicamente desde las altas esferas y también desde otros estratos públicos, pero a la hora de la verdad sólo se ayuda lo que da promoción personal al interesado.
El señor De Hoz, presidente del atletismo español, ha llenado los medios informativos -menos este, que procura no hacerse eco de contradicciones-de quejas sobre el poco dinero con que va a contar en el próximo ejercicio. Naturalmente, se cura en salud porque, como la mayoría de los directivos en este país, no tiene la valentía de pechar con lo que hay y, sobre todo, arreglar simplemente los cimientos que luego pueden aprovechar sus sucesores. Bastante tiempo estuvo ya en una Federación anterior y, aunque se moviera de cuando en cuando el cotarro, los frutos no fueron demasiados cuando ahora estamos tan mal. Para el Deporte, con mayúsculas, de este país -y que se haga una encuesta si no- siempre tiene que ser mejor invertir el poco dinero que tiene el atletismo en fomentar pruebas como la del domingo. Ya sabemos que los encuentros internacionales son importantes para mantener contactos, y que se movilizan más personas que en otros deportes con el gasto subsiguiente, pero también es de dominio público que ante ellos, que muchas veces son de placer, vale cien veces más que setecientas personas corran por unas calles durante tres horas sin contaminación. «Medallitis», aparte.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.