_
_
_
_

La enfermedad de Tarradellas, en situación estacionaria

El estado del presidente de la Generalitat continuaba estacionario anoche, pese a que diversas informaciones periodísticas -concretamente Mundo Diario- señalaran ayer que se había producido anteanoche un empeoramiento.Dichas informaciones partirían de un hecho real, como fue el que anteayer Josep Tarradellas sufriera una leve lipotimia, sin mayores consecuencias inmediatas.

La lipotimia fue causada, según fuentes médicas, por «una baja momentánea de la presión venosa, debido a la prolongada estancia en la cama». Las fuentes señalaron que ello no tenía nada de anormal y que un electrocardiograma efectuado de inmediato era absolutamente satisfactorio.

El temor de los médicos que atienden a Tarradellas es que se produzca un proceso tromboflebítico, pese a no existir ningún indicio del mismo. Por ello prescribieron, como medida preventiva, que las piernas del enfermo sean sometidas a movilidad varias veces al día.

Con relación a las posibles imprecisiones de medios de comunicación barceloneses, es de recordar que desde un primer momento las mayores imprecisiones e inexactitudes, sin duda voluntarias, acerca de la enfermedad de Tarradellas, provinieron de las propias fuentes oficiales de la Generalitat, las cuales aún no han utilizado en ningún momento el nombre de la enfermedad real que aqueja a Tarradellas: primero una bronconeumonía séptica y posteriormente una bronconeumonía.

Como dato concreto, EL PAIS puede afirmar que el sábado pasado el equipo médico que atiende a Tarradellas redactó un parte médico absolutamente ajustado a los hechos, indicando que la dolencia real era una bronconeumonía. El parte fue traducido al catalán por el doctor Vila-Abadal, con la finalidad de hacerlo público, pero no vio la luz por deseo de Frederic Rahora, colaborador di recto de Tarradellas, quien prefirió emitir una nota del gabinete de prensa de la Generalitat, cuyo contenido informativo era extremadamente escaso e impreciso.

Debido a la mala información oficial, ayer circularon en los medios políticos barceloneses todo género de rumores, señalando en general un presunto agravamiento del estado de salud de Tarradellas. Ninguno de estos rumores pudo ser confirmado por EL PAIS, al tiempo que fueron desmentidos por el gabinete de prensa de la Generalitat. Dato este último irrelevante, dada la política de desinformación mantenida por este gabinete acerca del estado real de salud del presidente de la Generalitat.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_