Amenazas de guerra entre Rabat y Argel
La crisis del Sahara occidental adquiere nuevas dimensiones tras las amenazas bélicas contenidas en las advertencias recíprocas entre Marruecos y Argelia. Argel ha hecho saber oficiosamente a Rabat, a través del periódico Al Chaab, que cualquier acto que atente a su soberanía territorial será considerado una declaración de guerra y encontrará la respuesta oportuna.
El monarca marroquí anunció el domingo que sus tropas harían uso del «derecho de persecución» contra el Frente Polisario, apoyado por Argelia, si los guerrilleros saharauis penetraban en territorio marroquí. En ambos países, el clima emocional sube de tono. Las conversaciones entre Francia y el Polisario, de otra parte, han sido suspendidas. Parece que el negociador francés, que ha regresado a su país en busca de instrucciones, considera que las negociaciones para liberar a los técnicos galos en poder del Polisario han llegado a un callejón sin salida. Fuentes saharauis aseguraban ayer que el general marroquí Dlimi se encuentra desde hace días en París, en una visita oficial cuyo contenido se desconoce. Los medios informativos parisienses destacan la gravedad de la crisis sahariana. Socialistas, comunistas y radicales se han pronunciado formalmente contra cualquier intento de intervención de las tropas francesas que permanecen en estado de alerta.La última iniciativa diplomática sobre la cuestión sahariana fue la sugerida ayer por Gabón en la Comisión de Descolonización de las Naciones Unidas, pidiendo que la Asamblea General remita el tema, que actualmente se debate en la ONU, a la reunión «cumbre» de la Organización para la Unidad Africana.
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