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El expediente de El Goloso, devuelto a la justicia militar

El coronel juez instructor del juzgado militar permanente número dos ha citado para hoy a los abogados defensores de Manuel Blanco Chivite, Pablo Mayoral Rueda y Vladimiro Fernández Tovar, condenados en consejo de guerra celebrado en El Goloso, para practicar diligencias en relación con la aplicación de la amnistía a los tres presos.

La Audiencia Nacional devolvió por la mañana el sumario del consejo a la autoridad militar, que previamente lo había remitido a la jurisdicción ordinaria, que se declaró incompetente, el pasado jueves, en virtud del artículo nueve de la ley de Amnistía, que establece que la aplicación corresponde con exclusividad a los jueces y tribunales correspondientes, que en este caso serían los militares.Medios de la defensa se han mostrado de acuerdo con esta razón jurídica, aunque estiman que se ha dado un excesivo burocratismo, que contradice el espíritu de la ley de Amnistía, cuyo artículo diez establece que la autoridad judicial competente deberá ordenar inmediatamente la puesta en libertad de los beneficiados que se encontrasen en prisión.

Si la jurisdicción militar se declarase incompetente en el tema, el sumario tendría que ser trasladado al Tribunal Srupremo de Justicia, que decidiría la jurisdicción a la que corresponde la aplicación de la gracia.

Por otra parte, fuerzas de la Policía Armada han reforzado la vigilancia en la prisión de Córdoba, habitualmente custodiada sólo por la Guardia Civil, al parecer por el temor a que la puesta en libertad de Blanco Chivite, preso en este establecimiento, sea seguida de un motín de los reclusos comunes. Mientras tanto, informadores de varios medios de comunicación montan guardia a las puertas de la prisión, esperando la salida del recluso político.

«Una vergüenza», según el director de la cárcel

El director de la prisión, Juan Manuel Lorenzo, declaró el pasado jueves a Diario 16 que «si es cierto que la Audiencia Nacional ha amnistiado a Blanco Chivite y Fernández Tovar es una vergüenza». Después de reiterarse en esta afirmación, el señor Lorenzo añadió que «de cualquier modo, en las cárceles españolas hay más asesinos que Blanco Chivite y Tovar».

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