Continúa estacionario el conflicto olivarero en Andalucía

Continúa prácticamente estacionaria la huelga de olivareros andaluces que, desde el pasado viernes día 23, y por convocatoria de la Unión del Olivar Español, mantiene alrededor de 12.000 tractores aparcados al borde de carreteras de Jaén, Córdoba, Sevilla, Málaga y Granada.

Aunque en esta última provincia el número de tractores se vio sensiblemente disminuido en el transcurso de la jornada de ayer, debido a que la protesta de muchos de los agricultores de la vega estaba provocada por problemas relacionados con las producciones de cebolla y maíz, en las otras cuatro provincias la situación se mantuvo en circunstancias similares a los días anteriores, en espera del resultado de la entrevista que el presidente y una comisión de representantes de la junta nacional de la Unión del Olivar tenían previsto celebrar, en la tarde de ayer, con el ministro de Agricultura, señor Martínez Genique.Mientras tanto, en la capital jiennense, ha tenido lugar el primer encuentro de las Uniones de Agricultores y Ganaderos de las regiones olivareras de toda España, con asistencia de varios cientos de delegados de Cataluña, Aragón, Valencia, Castilla, Extremadura y Andalucía. Los miembros de la UAG, que como se sabe se han opuesto desde el principio a la salida de los tractores a la carretera, acordaron pedir que el problema del olivar sea públicamente discutido en las Cortes, «ya que 600.000 familias de toda España están a la espera de soluciones para poder vivir del sector olivarero».

Asimismo, durante la reunión se aprobó una tabla reivindicativa del sector en la que, entre otras cosas, se exige el precio mínimo de 120 pesetas kilo de aceite para la presente campaña, la revisión trimestral de dicho precio, el control por los sindicatos de las importaciones de aceites extranjeros y la desaparición de las que no sean estríctamente necesarias, libertad total de exportación sin intervención de los monopolios y, finalmente, la compra inmediata por parte del Estado de todo el aceite actualmente almacenado.

Este movimiento de olivareros parece que ha desbordado a sus convocantes iniciales y que asuma en estos momentos el malestar contenido del campesino de ese área. Sobre la Unión del Olivar, organización poco conocida hasta ahora, y la iniciativa del movimiento actual, algunos de sus protagonistas son los siguientes:

En Lucena promueven la Unión del Olivar don Pedro Vibora, bodeguero, y el abogado señor Sánchez Herreros, propietarios de olivares, como todo terrateniente andaluz, pero no significados olivareros; en Cabra el promotor es don Carlos Garrido Moreno, hermano del alcalde, de quien es la frase siguiente: «En la Unión del Olivar pueden entrar desde la Pasionaria al marqués de Villaverde.» Precisamente un marqués, el de Las Escalonas, está entre los manifestantes de Cabra; reside habitualmente en Madrid y es el padre del ayudante de campo de Su Majestad; en Puente Genil, un teniente de alcalde; en Baena, don Pedro Onieva y don Andrés de Prados Santaella, ingeniero agrónomo y hasta ahora presidente del Sindicato Provincial del Olivo; en Villanueva de la Reina, el alcalde. Así en toda Andalucía.

Por su parte, representantes de la Unión del Olivar se reunieron ayer con el ministro de Agricultura, señor Martínez Genique, en donde no se llegó a ninguna conclusión diferente a las conocidas y ya apuntadas en la reunión que hace unos días mantuvieron otros representantes del sector olivarero con el responsable de Agricultura.