Nuevas discrepancias en el Partido Socialista portugués

La discusión en el interior del Partido Socialista Portugués (PSP) ha estallado de nuevo a raíz de las críticas formuladas por el ex ministro de Agricultura, Lopes Cardoso, en una reunión de la agrupación «Fraternidad trabajadora», que engloba al ala izquierda del PSP y a los socialistas independientes.

Otro punto en el debate son las palabras pronunciadas en el reciente congreso del Partido Socialista Francés (PSF) por el líder del CERES, Jean-Pierre Chevenement que advirtió en sus correligionarios para «no morir como en Chile, ni traicionar como en Portugal».

Por una parte, la federación de Lisboa critica duramente a la «Fraternidad trabajadora», solicitando que las altas esferas del PSP se pronuncien sobre la posibilidad de que militantes del partido e incluso diputados del mismo, puedan pertenecer a una organización «cuya razón de ser es el combate a la orientación política del partido». Asimismo, los socialistas de Beja (circunscripción que representa Lopes Cardoso) rechazan que el ex ministro pueda representarlos en el Parlamento y Manuel Alegre, el alter ego de Mario Soares acusa a Cardoso de «egocentrismo».

Pero las exigencias de que el socialismo portugués se defina en una línea clara respecto a los principios socialdemócratas a la manera del SPD alemán o a los del socialismo del sur de Europa (PSOE y PSF) no provienen sólo del ala izquierda del PS portugués, sino también de la derecha política, socialdemócratás y centristas que continuamente plantean este problema en el Parlamento lisboeta.

Entretanto, la izquierda socialista trata por todos los medios de variar el rumbo político de su partido y del Gobierno presentando como argumento a su favor, el fracaso socialista para aislar al Partido Comunista en el seno del movimiento sindical. Alegre, minimiza este punto y advierte que la querella interna del PSP no es diferente y más grave de la existente entre Mitterrand y el CERES.