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Reportaje:

El feminismo, entre la autonomía y la lucha de clases

La explosión del movimiento feminista es un hecho. Algunas personas llegan hasta afirmar que es el acontecimiento político de estos dos últimos años. Dejando de lado estas cuestiones siempre competitivas, es evidente que nunca hasta hoy el feminismo ha tenido tanta fuerza ni ha asociado tan coherentemente la reflexión teórica a una práctica necesaria.Consecuencia de todo esto es: la clarificación de los postulados feministas frente a posturas recuperatorias de base cultural patriarcal/capitalista; la decidida opción por parte de las mujeres de estudiar en profundidad las leyes y organizaciones de una sociedad opresora; la decisión de acceder a la palabra a través de una prensa específicamente feminista, radios independientes. Y, por último, la capacidad de movilización, a todos los niveles, de un número cada día más importante de mujeres: al día siguiente del fallecimiento de una parturienta, causado por la negligencia del médico, 50.000 mujeres se manifestaban en Roma; 15.000 mujeres se reúnen, en menos de seis horas, en una ciudad también italiana, para protestar contra el juicio de C. C., doblemente violada.

Frente a una opresión internacional y multiforme, el movimiento trata de responder también a nivel internacional, estructurando acciones que le permitan abarcar todas las formas de opresión/represión en todos los países del mundo.

Por ello se organizó en París, los 28,29 y 30 de mayo, en el marco de la Universidad de Vincennes, el primer Encuentro Internacional de Mujeres, al que asistieron representantes de Suiza, Italia, España, Inglaterra, Austria, Alemania, Finlandia, Checoslovaquia, Grecia, Dinamarca, Canadá, Estados Unidos, América del Sur (Brasil, Argentina, Venezuela ... ), Africa (Senegal, Malí, Zaire, Argelia...) y, naturalmente, Francia.

Desde el primer día se vio clara la contradicción entre la práctica real de los movimientos de mujeres que pretenden acabar con la jerarquía, la toma de poder y las limitaciones de una organización piramidal (haciendo suya la frase de Gudrun Ensslin «quebrar la sicología del poder/autoridad con tanta frecuencia y durante todo el tiempo que sea necesario, hasta lograr que los humanos seamos más fuertes que ella»), y la voluntad de ciertas tendencias que se plantean el problema de la eficacia únicamente en términos de organización y de estructuración.

Riqueza y variedad

Todo esto, en apariencia «terriblemente contradictorio» (para ciertas mentes que hayan introyectado el discurso masculino), hizo que los tres días pasados en Vincennes fueran de una tal riqueza y variedad como nunca hubieran pensado las organizadoras. Si, efectivamente, el programa no se llevó a cabo de una forma rigurosa, al salirse de los márgenes establecidos, dio lugar a una comunicación más anárquica, sí (los grupos se creaban informalmente, paralelos a las comisiones previstas, se discutía en las aulas y al sol, sobre la hierba, se unían y se desunían espontáneamente e incluso en la asamblea general nos quitábamos la palabra unas a otras), pero lo que es cierto es que en tres días un gran caudal de comunicación, a todos los niveles, en el trabajo y fuera de él (bailando, cantando, sintiendo), invadió la Universidad de Vincennes y confirmó, entre otras cosas, que el movimiento feminista es irreversible y que la colaboración internacional es posible entre los distintos grupos, diversos por su planteamiento teórico y su práctica, pero que pese a estas divergencias, posibles arribismos, y aparentes o reales fanatismos, las mujeres están decididas a seguir adelante, y puesto que no teme a las diferencias, sino que las reivindica, realizará el proceso de lucha partiendo de su propia experiencia,

Represión al feminismo

La coordinadora encargada de la organización del encuentro sacará en breve un informe completo sobre las conclusiones establecidas en los diferentes grupos de trabajo de las jornadas, pero se puede ya adelantar algunos de los temas de batidos:Represión: La doble represión que sufren las mujeres en las cárceles, primero por estar en ellas, luego por su estatuto social de mujer; discriminación entre los delitos considerados «típicamente femeninos» y los que «no lo son», como la militancia activa, o el robo a mano armada; la presión, a cualquier nivel, que se ejerce para devolver a la mujer presa a «su especifidad femenina», a través del trabajo «de casa»,en lugar de otros más interesantes; el chantaje ejercido para que las madres prisioneras dejen adoptar sus hijos «prisioneros desde que nacen hasta los dieciocho meses», edad en la que, sin previo aviso, si no tienen familiares, pasan sistemáticamente a la asistencia pública; represión brutal de la homosexualidad".

Homosexualidad: La mujer lesbiana es considerada como una grave amenaza contra «el núcleo familiar patriarcal /capitalista, y por tanto, es reprimida, no sólo por su sexo, sino también a causa de su sexualidad específica. Si además pertenece a una clase oprimida, o a un grupo étnico minoritario, su opresión puede ser doble o triple. El movimiento feminista interpreta que la persecución contra las lesbianas no es más que la extensión de la opresión contra todas las mujeres, pues todas, heterosexuales o lesbianas, rechazan el papel tradicional de la mujer.

El sexismo, como el racismo y otras formas de-segregación (se opone el trabajador a la trabajadora; la mujer que tiene un empleo, a la que está en paro o es ama de casa; la mujer del país, a la emigrante ... ), ha sido utilizado para dividir a los grupos subyugados en beneficio de las clases dirigentes. La lesbiana, representa el segmento más intensamente reprimido de cada clase social.

Aborto-maternidad: Derecho a la mujer para disponer de su propio cuerpo, necesidad de que todos los países acepten el aborto libre y gratuito; elección del método y circunstancias del mismo; derecho a elegir libremente la maternidad; derecho a inventar nuestra propia sexualidad; lucha contra el poder médico y de los laboratorios sobre nuestros cuerpos, contra la comercialización de métodos anticonceptivos nocivos; generalización de métodos de nacimiento sin violencia; desmedicalización del parto; creación de guarderías.

Violación /violencia: Las siguientes cuestiones planteadas en la comisión hacen reflexionar: ¿Por qué la mayoría de las violaciones se producen o en la familia o dentro del ambiente de la víctima? La estadística alemana que no contradice la de otros países es clara; 70 % realizada por gente que la víctima conocía; 16 % por el padre, el tío, el primo; 35 % por un grupo. ¿Por qué la mayoría de las violaciones no se denuncian? ¿Por qué la mayoría de las mujeres que acuden a los centros de mujeres maltratadas han sido antes violadas? ¿Por qué el tanto por ciento de violaciones es similar en todas las clases sociales? ¿Por qué en todos los países la mujer que denuncia una violación es tratada por la policía y la justicia luego con desprecio, se sospecha de su colaboración y en el peor de los casos pasa de víctima a acusada? ¿Por qué, como se comprobó en Italia, el juicio se desarrolla de diferente manera si en la sala está presente el movimiento feminista o no? ¿Por qué la necesidad evidente por parte de las feministas de cambiar, no sólo las leyes, sino también su interpretación? En Australia se ha conseguido que la mujer pueda denunciar al marido por violación, pero, ¿cómo interpretará el juez y el abogado esta ley? La experiencia demuestra que no sólo hay que cambiar la ley, sino la mentalidad del que la aplica. ¿Por qué la prensa, de izquierdas o de derechas, instrumentaliza la violencia ejercida sobre la mujer, de acuerdo con sus propios intereses? ¿Por qué se habla de la mujer únicamente como cuerpo? La denuncia de la violencia, ¿es un acto revolucionario o es una colaboración con la justicia burguesa que nos oprime? Si se considera que es preciso denunciar la violencia contra las mujeres, ¿por qué éstas no pueden establecerse parte civil, como movimiento feminista, a la manera en que los sindicatos lo hacen, con motivo de accidentes de trabajo, por ejemplo? Además de todas estas cuestiones y muchas más, otras comisiones discutieron sobre energía nuclear y feminismo-marxismo y feminismo.

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