Diferencias políticas en ETA
«No sabemos si la escisión va a ser definitiva; por eso no es lícito hablar de ruptura, y menos en un momento político de tensión como el que estamos viviendo», han declarado a EL PAÍS dos miembros de la directiva de ETA en su rama político-militar, en relación con las últimas informaciones que aseguraban la existencia de una profunda división en el seno de esta rama de ETA.«Las diferencias dentro de nuestra organización -agregaron- son producto de la actuación de la dirección ante hechos concretos: no son por tanto diferencias ideológicas, sino políticas.» Negaron, asimismo, que desde la VII Asamblea haya habido tregua, y aseguraron que ellos nunca han querido abandonar la lucha armada. «Una prueba de ello, que podemos decir porque la policía la tiene, es que la directiva dio en su momento la orden de ejecutar a Fraga Iribarne, que no se llevó a efecto por otras razones.»
«Los comandos especiales, berezi, al tener unas diferencias de argumentación política podrían interpretar de un modo no exacto nuestra falta de presencia en la lucha armada, pero esto no se ha dado por una falta de voluntad de esta lucha, sino porque ha fallado el objetivo. Este choque de mentalidades y diferencias de análisis políticos se produce porque en una organización que no está en debate siempre tiene diferencias a la hora de establecer los análisis. »
«Pero nuestros enfrentamientos son menores a las cosas que tenemos en común, porque al fin y al cabo todos seguimos de cerca el proceso político del Kas y la izquierda abertzale. Dentro del Kas hay un criterio común de observación de los análisis políticos de la izquierda; los planteamientos de la lucha armada habrán de estar dentro de estos criterios políticos.»
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.