Mercado imperfecto

En pleno período electoral el peso el ingrediente político no podía alejarse de notar en la Bolsa de capitales. Después de la fuerte recuperación de la semana precedente, a pesar de que se esperaba una cierta continuidad en ésta, basada en el importante viaje del presidente Suárez a México y a Estados Unidos, lo cierto es que ha evolucionado negativamente.Como la jornada inicial fue bastante desastrosa y rara en el comportamiento de los principales operadores, se llegó a interpretar como un descontento a que Suárez hubiera decidido presentarse a las elecciones encabezando una opción de centro. El hecho es que ese día, cambiaba la tónica de superficie, se ponían fuertes partidas a la renta y el índice promedio habría descendido más si no se hubiera compensado con el alza de Telefónica.

Una vez más quedaba evidenciada la falta de transparencia que sufre nuestro mercado de valores, con una formación del precio bastante dudosa, que la actuación de los agentes no ayuda precisamente a clarificar.

Por sectores, y a pesar de que el índice general madrileño no ha experimentado demasiada pérdida (-0,61 %), sólo dos grupos, el de monopolios y el químico, mejoran sus parciales. En el primer caso, por el claro apoyo del Banco de Espáña, más ostensible aún en las eléctricas, en una tarea que no es exactamente de open market, sino de apoyo descarado.

El grupo con mayor baja fue el de los bancos comerciales, que siempre es el más exagerado, tanto en sus recuperaciones -recordemos la semana precedente- como en sus depresiones.