Los taxistas librarán dos días a la semana

Por más de seiscientos votos, los autopatronos y asalariados del taxi ganaron el pasado sábado las elecciones para hacer definitivo el día de libranza semanal. Las votaciones, a las que asistieron cerca del 40 % de los trabajadores de la industria, decidieron que el sistema que en los últimos meses realizaban los taxistas madrileños era el más idóneo a las circunstancias actuales.Los dos sistemas entre los que autopatronos, empresarios y asalaríados, unidos por primera vez en unas votaciones, tenían que elegir, se centraban en el propugnado por los empresarios, con seis- días de trabajo a la semana y un domingo libre, alternativamente, además de otro día semanal obligatorio de libranza, y el defendido por el resto de los trabajadores,, que deseaba trabajar cinco días a la semana. Otro de los temas que se iba a decidir era la hora a la que los taxistas madrileños podrían incorporarse voluntariamente a su trabajo, los días libres de servicio.

Hasta ahora, los trabajadores del taxi que lo desearan comenzaban, a trabajar a las tres de la tarde del sábado o domingo que libraban. Según se aprobó el sábado, desde ahora se podrá empezar únicamente a partir de las ocho de la tarde, hora considerada buena por los autopatronos, ya que así se limita la competencia sin que el público se encuentre desasistido.

Los empresarios, disgustados

Nada más conocerse el resultado de las votaciones, en las que sólo se permitía un voto por persona censada y no por licencia, los empresarios manifestaron que la medida adoptada en las urnas les -era totalmente desfavorable. La obligación de dar dos días libres a los trabajadores es, según su opinión, desastrosa, ya que las pérdidas van a ser incalculables.Entre los considerados por los empresarios como responsables de esta elección figura, al parecer, Santiago Estrada, delegado de Circulación y Transportes del Ayuntamiento, que se ha distinguido en los últimos meses por lograr una estabilidad dentro de la industria del taxi. Sin embargo, esta estabilidad no ha convencido a los industriales que han visto cómo Seguridad Social, instalación de puestos de butano, exención de impuestos y ahora semana de cinco días eran conseguidas por los trabajadores.

Durante el último semestre del ano pasado y los primeros meses de éste, la tensión dentro de la industria ha hecho que las reivindicaciones solicitadas por un sector fueran impugnadas por otro, inmediatamente. El convenio colectivo, que no se llegó a firmar y por el que los asalariados decidieron crear una cooperativa del taxi, actualmente en trámite, y la concesión de, la seguridad social a los trabajadores autopatronosl-que -incluso-amenazaron con llegar a una huelga na-. cional de la industria, y separación de autopatronos e industriales, al crear aquéllos una federación, cuyos locales fueron inaugurados la sernana pasada por el ministro de Relaciones Sindicales y el alcalde, han sido los puntos más destacables. En ellos, el señor Estrada intentó solucionar las distintas situacionesí sin que el juicio del Ayuntamiento se hiciera obligatorio.

Sobre el problema del día de libranza ha habido muchas presiones y, a pesar de ellas, se resolvió que los trabajadores deberían ser los que decidieran.