Peor que ayer, aunque mejor que mañana

El titulo de la crónica es quizá lo que mejor describe las características de estas últimas sesiones. Ya casi ni las noticias políticas de grandes inquietudes alteran el pausado sonar a la baja de las cotizaciones. En la sesión de ayer se mantuvo la presión vendedora intensa de los bancos, que no tienen ninguna respuesta compradora. Los grandes perdieron entre nueve y quince enteros, y prácticamente ninguno marcó una tímida posición positiva.Junto a los bancos, los corros químico y minero-siderúrgico son los que protagonizan la caída del índice general, que en la sesión de ayer quedó al mínimo del año, en 89,36.

A falta de interés por los cambios, los comentarios de los habituales en el parquet se centraban en la dimisión del ministro de Marina y en la inquietud de la noche anterior por posibles movimientos de tropas que modificaran sustancialmente el clima político de los últimos meses.

En los demás corros, las posiciones fueron más moderadas, con predominio de ventas, aunque con poca actividad interés.

La disposición del mercado para hoy seguía siendo de claro predominio vendedor, especialmente en bancos y químicas, lo que llevará a nuevos mínimos. De momento sólo cabe esperar alguna reacción` técnica cuando los cambios alcancen niveles excesivamente bajos.