La EMT soporta el lastre económico de hace treinta años

«La empresa Municipal de Transportes tuvo la desgracia de recibir una empresa totalmente hundida», declaró Santiago Estrada, delegado de Circulación y Transportes del Ayuntamiento de Madrid, durante la rueda de prensa semanal, que se celebró ayer en la Casa de la Villa, en esta ocasión dedicada por entero a los temas de la EMT. El señor Estrada añadió: «La empresa no ha podido convertir lo que recibió hundido en una sociedad con beneficios, pero sí ha logrado mejorar el servicio de transporte que reciben los madrileños.» A esta rueda de prensa no asistió el alcalde, que, tras saludar a los periodistas, se disculpó.La rueda de prensa consistió, fundamentalmente, en analizar detenidamente lo que ha sido la historia de la Empresa Municipal de Transportes desde su nacimiento jurídico, el 21 de junio de 1948 -e incluso desde sus antecedentes-, pormenorizando su situación actual deficitaria, de acuerdo con un documento informativo que fue facilitado en la rueda de prensa de la semana pasada y que, en esa ocasión, se dio por recibido, con el compromiso, por parte de los informadores municipales, de estudiar el material recibido para debatirlo en el curso de la rueda que se celebró ayer.

Personal excesivo

Ese documento informativo se refiere, en varias ocasiones, al lastre que supuso para la EMT, y aun ahora, el tener que hacerse cargo, en su día, y a la vista del gran déficit que sufría la empresa privada -una empresa mixta con intervención municipal- de todo el transporte público de superficie. El mayor lastre, aparte de la situación financiera, «con un activo obsoleto y un pasivo de carácter financiero muy alarmante», sería el tener que hacerse cargo de todos los trabajadores con que contaban las distintas empresas de transportes existentes en la ciudad, desde los 427 empleados de la Compañía Madrileña de Urbanización -con un coeficiente de 19,4 empleados por coche, cifra superiora los 11,8 que entonces tenía la empresa mixta-, hasta los diecisiete trabajadores de la Empresa Vallecana de Trolebuses (coeficiente de 5,6 empleados por coche).

Para Santiago Estrada, en ningún momento desconocedor del tema de la Empresa Municipal de Transportes, ya que, con ante riotidad a ser delegado de Circulación y Transportes, permaneció en, la EMT durante veinticinco años, llegando a ocupar el cargo del director-gerente, «el gran éxito de la gestión de la empresa en sus casi treinta años de existencia ha sido el conseguir reducir ese número de empleados por coche hasta los 4,06 con que cuenta en la actualidad.» «Ahora bien -puntualizó el señor Estrada- el número que podría ser el ideal para la atención de los coches estaría un unos tres por vehículo.»

Pero a pesar de las explicaciones, del señor Estrada, los informadores no salieron de la rueda plenamente convencidos de que, en la actualidad, sean necesarios los 7.400 trabajadores con que cuenta la empresa, incluyendo 247 subalternos, siete letrados, etcétera.

Tarifas

En la misma rueda se destacó que las tarifas de la EMT son de las más bajas de España, con una media prevista para 1977 de siete pesetas el billete, contando con las nueve pesetas del billete ordinario, las quince del de ida y vuelta y los 2.400 abonos existentes que ofrecen, al usuario un viaje por cinco pesetas.« Pero el lastre de la EMT en materia de tarifas está en los dieciséis años que, desde 1952, la tarifa ha permanecido congelada, sin que se produzca ningún tipo de incremento, a pesar del aumento de los costes de explotación. »

El coste del kilómetro recorrido por un autobús de la EMT se eleva a setenta pesetas. Sin embargo, es posible conseguir el alquiler de un flamante autocar, con aire acondicionado, por sólo 45 pesetas el kilómetro. «Pero esas cantidades -insistió Santiago Estrada-, son heterogéneas. Hay que, tener en cuenta que cuanto mayor es el volumen de la ciudad y, por supuesto; el de su empresa de transportes, mayor pasa a ser el coste de la explotación, en una función lineal. Una empresa de tranporte urbano de una ciudad pequeña puede incluso hasta obtener beneficios.»

Refiriéndose a unas declaraciones del alcalde en una anterior rueda de prensa, el señor Estrada habló de que, si la red de Metro en la ciudad fuera suficiente, tanto como para que la red de la EMT no tuviera necesidad de ser tan grande, el coste por kilómetro recorrido sería, necesariamente, menor.

Política de transportes

La política de transportes del Ayuntamiento quedó en manos de la Comisión Municipal de Gobierno, de acuerdo con los estatutos de la EMT que fueron aprobados por la Corporación municipal, en el año 1971. Pero, como ya se ha reconocido en alguna ocasión, los concejales dieron su visto bueno a algo,que no sabían qué era lo que significaba.«La política de transportes municipales -aseguró-. pertenece al pleno del Ayuntamiento y el mismo alcalde así lo dijo. Todo lo que se refiera a incorporaciones o innovaciones en la empresa, acudirá por supuesto, a las comisiones informativas y, por ende, al pleno del Ayuntamiento de Madrid.»

'Con respecto a la posibilidad de que este tipo de sesiones informativas monográficas se sigan produciendo periódicamente, bien a través de la prensa o en cualquier otra forma. «Yo estoy convencido que tratándose como se trata de una empresa pública, cuantos más datos se den sobre ella, mejor. »