Un vigilante jurado, herido de gravedad en un atraco

Un vigilante jurado herido de gravedad es el resultado de un atraco realizado por dos jóvenes armados con pistolas en una sucursal del Banco Popular Español. La oposición física puesta por el vigilante a los atracadores y el valor de uno de los empleados que posteriormente hizo funcionar la alarma, hizo que los asaltantes huyeran sin apoderarse de cantidad alguna de dinero.

Sobre las once y media de la mañana dos hombres armados con pistolas penetraron en la sucursal urbana número 10 del Banco Popular Español, en la calle General Sanjurjo, esquina a Ponzano. Al ver a los dos hombres, Saturnino Muñoz, vigilante jurado de la sucursal intentó detener a los atracadores con los que forcejeó hasta que sonó un disparo, y el guarda cayó al suelo.Mientras uno de ellos gritaba a las diez personas que se encontraban en el lugar, entre dependientes y clientes, que se tiraran al suelo, el segundo de los jóvenes saltó el mostrador y se dirigió hacia la ventanilla de caja. Fue en ese momento cuando uno de los empleados hizo funcionar el sistema de alarma, motivo por el que los atracadores dispararon dos veces más y se dieron a la fuga sin obtener ninguna cantidad de dinero.

Según manifestó una señora a la policía, los atracadores salieron andando de la sucursal bancaria durante un trecho de la calle Sanjurjo. Posteriormente se supo que un tercer compañero, al volante de un automóvil sustraído, les esperaba para darse a la fuga.

Sin embargo, el atraco fallido y el temor a que algún testigo hubiera visto la matrícula del automóvil Seat 132 que estaba aparcado en la calle hizo que abandonaran el vehículo unos metros más lejos.

Los testigos del fallido atraco coinciden en señalar el nerviosismo de los asaltantes, dos jóvenes de unos veinticinco años, de aspecto normal y que iban bien vestidos, uno con traje gris y el otro con traje de color azul marino. La estatura media de los jóvenes era de 1,70 metros y llevaban pelo castaño y rubio respectivamente.

Trasladado urgentemente a la Ciudad Sanitaria La Paz el vigilante fue intervenido quirúrgicamente en los departamentos de neurocirugía y cirugía maxilofacial, siendo su estado a última hora de la noche grave. Según fuentes de la compañía Esabe, a la que pertenece, Saturnino Muñoz llevaba más de un año ocupando el puesto de vigilante jurado en esta sucursal.

Un parte facultativo, facilitado por el equipo quirúrgico de La Paz donde quedó ingresado amplió a últimas horas de ayer la información sobre el estado del herido. Según dicho parte, la bala, tras lesionar algunos nervios, entre ellos el facial derecho, se alojó cerca de la boca, de donde fue extraída.