La Asociación Democrática de la Mujer, otra vez en el Supremo
La Asociación Democrática de la Mujer (ADM), de Madrid, cuya solicitud de inscripción en el Registro de Asociaciones Política fue recientemente denegada presentó el lunes pasado las alegaciones correspondientes ante la Sala IV del Tribunal Supremo.Contra uno de los argumentos en los que basa el Ministerio de la Gobernación su negativa a legalizar a la ADM, que hace referencia a discriminación por razones de sexo, la Asociación alega que «entre los fines de la ADM figura la terminación de la discriminación existente en razón de sexo».
Los pliegos de alegaciones han sido presentados por la procuradora Beatriz Ruano; actúa como abogado de la Asociación, Jaime Gil-Robles. Acompañan los pliegos la documentación interna y pública de la ADM y la copia de un escrito que ha sido enviado al presidente del Gobierno por varias fuerzas políticas (PSOE, PSOE (r), PSP, etcétera), solicitando la inmediata legalización de la Asociación Democrática de la Mujer.
En la actualidad, la ADM está llevando a cabo una campaña en favor al derecho al divorcio y de su legalización, recogiendo firmas de solidaridad entre los miembros de partidos políticos, asociaciones de vecinos y demás organizaciones aglutinantes del movimiento ciudadano.
Los estatutos de la ADM fueron entregados en el Gobierno Civil el día 25 de marzo del año pasado, y comenzó a funcionar con local propio, programa, etcétera, en mayo. Cuenta con más de mil militantes; en diversos grado de compromiso, y pertenece a la Federación de Organizaciones Feministas del Estado Español, recientemente constituida, aunque todavía no se ha incorporado a la Plataforma de Fuerzas Feministas, de Madrid.
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