La derecha portuguesa pide mano dura contra los "agitadores sociales"

El Gobierno portugués acaba de decretar la movilización de los trabajadores de la Marina Mercante. La decisión del ministro de Trabajo es encargada, para su ejecución, al Ministerio de los Transportes. Se desconocen, de momento, las modalidades de esta movilización de todos los trabajadores que se encuentran embarcados y en los servicios portuarios.El movimiento de huelga por un asunto de horas extraordinarias desencadenó la solidaridad de los pescadores, y había llevado a la casi paralización del puerto de Lisboa, creando grandes dificultades de abastecimiento y poniendo en peligro las relaciones con los archipiélagos de Madeira y las Azores.

El acuerdo entre el Banco de Portugal y la Secretaría de Estado del Tesoro USA sobre la concesión a Portugal de un préstamo de trescientos millones de dólares a título de ayuda de urgencia, fue firmado el viernes, según un comunicado hecho público en las dos capitales. La prensa portuguesa indica que se trata de la concretización de la primera fase de un programa de ayuda más amplio, que incluye un crédito de 1.500 millones de dólares que concederá un consorcio internacional constituido, por EEUU y algunos países miembros de la CEE, bajo los auspicios del FMI.

El tema de la estrategia sindical será, tal vez, el más crítico de la re unión que este fin de semana celebrará la Comisión Nacional del Partido Socialista, en la que hará una exposición exhaustiva Mario Soares sobre la política de su Gobierno. Si bien no hay dudas sobre el apoyo que el Gobierno socialista recibirá por parte del órgano dirigente de su partido, no existe la misma unanimidad en cuanto a la estrategia sindical, a propósito de la cual deberá ser publicado un documento de orientación. Oficialmente, el Gobierno continúa proclamando la necesidad de un pacto social a negociar con los sindicatos, pero las dificultades internas del partido y las conclusiones del reciente Congreso Sindical, que han sancionado el fracaso de los socialistas para crear una alternativa al predominio comunista en los grandes sindicatos obreros, así como el movimiento huelguista desencadenado esta semana, han hecho ganar terreno a los partidarios de la mano dura, para imponer la tranquilidad laboral. No se puede decir, sin embargo que los ultimátum lanzados hayan tenido efecto.

El Partido Social Demócrata (PSD) reúne también este fin de semana a su Consejo Nacional. Francisco Sa Carneiro hará también una extensa exposición sobre política nacional. Sa Carneiro se niega a endurecer la oposición al Gobierno Soares, hasta el punto de provocar su caída, e insiste en la necesidad de intensificar los contactos entre los partidos democráticos (excluyendo a los comunistas). La tensión persiste en las relaciones entre los Gobiernos de las regiones autónomas de Madeira y Azores, dirigidos por el PSD.

Por último, el Consejo Nacional del Centro Democrático Social (CDS) deberá aprobar la orientación dada por la actual dirección a la política de los centristas. Esta orientación fue reafirmada por Freitas do Amaral, a la salida de una audiencia con el presidente Eanes: calma política, para concentrar todos los esfuerzos y superar la crisis, económica. Esta táctica ha sido denunciada a derecha e izquierda como un pacto con el Gobierno socialista, y probablemente, será contestada por la derecha más radical en el seno del propio partido e incluso podría llevar a un pequeño sector del grupo a abandonarlo.