"Televisión ha manipulado mi pensamiento"

Manuel Cantarero del Castillo aseguró a EL PAIS que estaba «muy cabreado por lo que han hecho con mi intervención en televisión el miércoles por la noche». El señor Cantarero añadió que, aunque la versión íntegra de lo que declaró a RTVE va a ser emitida el próximo domingo en UHF, lo que se emitió la citada noche es una manipulación de su pensamiento.

Cantarero del Castillo, secretario general de la asociación Reforma Social Española, ha dirigido un telegrama al ministro de Información y Turismo en el que dice: «Protesto enérgicamente por intolerable manipulación de mis respuestas en la grabación España, hoy, pasada el día de ayer, las 21.30 horas por la primera cadena de RTVE. Creíamos que tales prácticas inmorales habían pasado ya á la historia. ¿Es que vamos a seguir con la farsa de siempre?»La farsa a la que se refiere Cantarero del Castillo es, según nos ha contado, la de utilizar del pensamiento ajeno sólo lo que conviene para ratificar las propias hipótesis. Por ejemplo, según Cantarero,«me preguntaron que si me parecía bien el modelo de democracia que contenía la ley de Reforma Política. Yo contesté que no. Dije que en el año 1964, un grupo de hombres que yo encabezaba empezamos a manifestar que un régimen autoritario no se justifica históricamente si no crea en el menor tiempo posible las condiciones objetivas en las que la libertad y la democracia sean viables».

Aquellas sugerencias no fueron aceptadas y, lo que entonces era cambio radical, hoy se convierte en tímida reforma. Respecto a la existencia de dos cámaras, por poner otro ejemplo, Cantarero del Castillo considera que sería mejor propugnar ahora la creación de una única cámara constituyente. «Entonces pedíamos -dice, refiriéndose a aquellos primeros años de la década de los sesenta- que el Consejo Nacional del Movimiento se transformase en una cámara de partidos políticos. Pero todo eso está superado. Ahora es irrelevante la existencia de una cámara o dos. Ya veremos lo que acuerdan las mayorías que triunfen en las nuevas Cortes.»