El lunes, los presidentes de federaciones, en la DND

El lunes habrá visita y reunión en la DND de los presidentes de las distintas federaciones nacionales con el delegado y sus ayudantes. El nuevo equipo del organismo rector del deporte español ha empezado a trabajar, y cara a los próximos cambios o renovaciones previstas quiere tomar contacto con sus «sucursales».Al parecer dos puntos serán los tratados con prioridad en la reunión: el sistema de funcionamiento a seguir y el tratamiento que se va a dar a las próximas elecciones.

Lo que es de suponer también saldrá a la palestra es la situación ambigua de algunos presidentes, dimitidos unos y no existentes otros, por haber pasado a otros puestos, caso de Florencio Noriega, nuevo director de Deportes y ex presidente de la Federación de Rugby. Por otro lado, sin que se haya dicho precisamente, resulta obvio que el momento se aprovechará para decidir la fecha de la Asamblea General del Deporte Españo4anunciad a en su día.

Las reuniones de presidentes federativos en la DND no es que sean nuevas, pero indudablemente, en este caso, se trata de una ocasión única. Por primera vez, se habla de una evolución -no revolución- y en ella hasta se podría plantear la reducción de federaciones. En realidad, no sería nada descabellado, pues la existencia de algunas, al menos con los condicionantes económicos de dependencia quinielística que se producen, resulta un tanto ridículo.

Basta ahora, en muchas federaciones se han sucedido las triquñuelas legales para presentar un «curriculum» de la temporada con competiciones abundantes y movimiento inusitado, a fin de justificar después una subvención apropiada. Esto no, es justo y con ello, sin hacer la labor que sería necesaria, se engaña a todo el mundo. El último caso de la Federación de béisbol puede servir de ejemplo. ¿Para qué se quiere dinero si su máxima competición, el Campeonato de España, se ha saldado o se va a saldar prácticamente con menos de cinco partidos? En su caso, como en otros, ¿para qué se mantienen federaciones provinciales -ya no decimos nacionales- sin movimiento deportivo ninguno? Sería hora de contestar a este problema.