Luis: "El fútbol de mi equipo es demasiado lento"

Al Atlético de Madrid le da buen resultado jugar en Viena. Las dos veces anteriores que ha visitado este país ha sido vencedor de la eliminatoria. La tercera, frente al Rapid de Viena, se presenta con un cariz optimista dado que el equipo austríaco atraviesa un gran bache en su juego. Lo malo reside en que los madrileños no están muy bien de forma, lo cual nos confirmó el propio Luis al decirnos que el «fútbol del equipo es demasiado lento». El partido no ha despertado demasiado interés. La verdadera expectación estará en el encuentro que a continuación del Atlético y Rapid diputarán el Borussia y el Austria Viena valedero para la Copa de Europa.

El Atlético de Madrid llegó a Viena el lunes a primera hora de la madrugada. El entrenador madrileño sólo tiene una dura en la alineación, que es la inclusión de Salcedo en la línea medular del equipo. La formación inicial será, por tanto: Reina; Marcelino, Benegas, Pereira, Capón; Alberto, Robi, Leal o Salcedo; Leívinha, Rubén Cano y Ayala. En el banquillo estarán Tirapu, Antonio, Heredia y Salcedo o Leal.El equipo se entrenó ayer por la tarde a las 6.30 hora española, es decir, la misma hora en que hoy se jugará el partido. Durante 60 minutos, los jugadores evolucionaron en el antiguo estadio del Prater, de malos recuerdos para el Real Madrid, donde perdió una final europea frente al Milán.

Los ánimos rojiblancos no están muy altos. El equipo puede resentirse más que por la derrota de Vigo por el juego que allí exhibió. Hay demasiada lentitud en el centro del campo y poca profundidad en el ataque. Es la consecuencia de tener tantos jugadores sudamericanos.

Luis, en las vísperas del partido, sabía de estos males, pero no la fórmula para subsanarlos. «Mis jugadores tienen una manera particular de ver el fútbol». El entrenador se queja, pero no tiene otros futbolistas donde elegir.

Benegas cubrirá la baja de Eusebio, sancionado con un partido internacional, por lo que el Atlético no puede andarse con muchas alegrías ofensivas. Pereira deberá permanecer atrás y confiar en las genialidades del trío sudamericano de punta para poder regresar a Madrid con un resultado favorable o minimamente desfavorable.

No se espera el debut de Antonio en competiciones internacionales así como el concurso de Heredia, lo que ya supondría un excesivo aglutinamíento de hombres en las líneas de retaguardia.

El equipo austríaco presentará la baja de sus máximas figuras. El domingo pasado empató a cero en su campo y está a cuatro puntos del líder, el Insbruck, en la quinta jornada de la competición. En un principio se alinearán: Barthlos; Kanttley, Perfidis, Pajenk,-Zapbach; Kirisipis, Kranse, Pregesbanen; Widmann, Krankl y Sclilagbauer. Los germanos Pawlek y Starek no podrán jugar frente al Atlético. De la ausencia de estos se resentirá notablemente el Rapid, ya que se queda sin su mejor punta, Walter Pawlek, y su mejor cerebro, Starek. Sólo tendrá que vigilar firmemente el Atlético a Krankl, máximo goleador de la Liga austríaca en la pasada temporada.

El ambiente en Viena no refleja la víspera de un partido europeo. Los espectadores acudirán hoy al Prater a ver a los fenómenos del Bórussia, pero no al Atlético de Madrid, equipo poco taquillero aquí y al Rapid, que ya pasó su mejor época.

El tiempo favorece al Atlético de Madrid. No es de esperar que. la lluvia haga su aparición y el calor predomina sobre el frío. Los seguidores rojiblancos que se lían desplazado hasta Viena para presenciar el encuentro no sobrepasan el centenar, pero, como decíamos antes, al despertar el partido poca expectación entre los austríacos puede que se oiga más a los españoles que a los vieneses.

La nota anecdótica de esta tarde reside en que Niki Lauda, una vez finalizado el encuentro del Atlético y el a Rpid, saludará al público desde el terreno de juego y celebrará un pequeño entrenamiento para demostrar la rapidez de su recuperación.